Qué sería de Aste Nagusia sin las comparsas, sin las txosnas, sin su concurso gastronómico... También en Bilboko Konpartsak se han puesto ya las pilas para una Aste Nagusia que llevan dos años esperando. "Todo marcha hacia la normalidad y dentro de ella todo el programa de actividades de las comparsas, fiestas incluidas. Estamos a tope", explica Ioritz Varona Montes, uno de sus portavoces. "Hay muchas ganas no solo por nuestra parte sino también por la gente, que lo necesita; han sido dos años que se han quedado en el limbo e hace falta ir recuperando celebraciones".

Saben, por experiencia, la carga de trabajo que supone completar un programa festivo para nueve días por Aste Nagusia, por lo que ya se han puesto manos a la obra. "Hay que empezar pronto porque si no se nos echa el tiempo encima. Este mes de abril ya hemos empezado a repartir las tareas dentro de cada comisión para ir atando actividades", relata el representante de las comparsas.

Pero ya antes de que llegue ese ansiado 20 de agosto, en el que Marijaia volverá a asomarse al balcón del Teatro Arriaga, las comparsas tiene programados varios actos con los que ir haciendo boca. El primero será el 12 de mayo, cuando comience la cuenta atrás de 100 días para el lanzamiento del txupin y que este año quieren que esté presente de una forma especial; el segundo, solo dos días después, con el Kapela Eguna del que este mismo viernes ofrecerán más detalles. "Habrá actividades para que la gente pueda disfrutar del día: un pequeño tour, un evento principal relacionado con Aste Nagusia, música por la calle con pequeñas kalejiras...", avanza a grosso modo. "Este año necesitamos esa energía que nos produce el poder participar y organizar; es un preámbulo de que estamos ya preparando las fiestas de Bilbao".

Más adelante, volverán a la carga el 11 de junio con la marcha al monte regulada Txosnagane, que organizan todos los años; los actos tradicionales de la noche de San Juan, y el Konpartsakide Eguna, el 16 de julio, el día en que se reúnen todos los miembros de las comparsas para disfrutar de una jornada festiva con una comida en El Arenal, romería, talleres para los más pequeños y un concurso de pintxos.

"NORMAL, QUE ES MUCHO DECIR"

Todo con la mirada puesta en una Semana Grande que se ha hecho esperar más de la cuenta. "Queremos que sea una Aste Nagusia normal, que ya es mucho decir después de dos años", confían los comparseros. No faltarán actos tan emblemáticos en el programa festivo como el concurso gastronómico o la Hiri Krosa; eso sí, siempre guardando las medidas de protección que estén vigentes en ese momento en base a la situación epidemiológica.

"Queremos que sea una Aste Nagusia con normalidad pero si hay cambios o una normativa que establezca determinadas medidas, nosotros vamos a respetarlas. Estarán todos los actos que solemos organizar, al 100%, con unas medidas o con otras", subraya su portavoz. "Nosotros mismo somos ciudadanos; si no nos cuidamos entre nosotros está complicada la cosa. Cuidarnos pero sin dejar de vivir porque han sido dos años muy duros".

Tampoco parece que, a priori, se vaya a tener que modificar la distribución de las txosnas dentro del recinto festivo de El Arenal, ni por medidas de seguridad ante el covid y porque tampoco se han incorporado en estos dos años nuevas comparsas a la federación. "Igual hay alguna zona que entra en obras y hay que realizar algún cambio pero la distribución no suele variar. Este año de momento no nos han comunicado nada", explica Ioritz Varona Montes.