El Ayuntamiento de Bilbao ha instalado 30 lectores digitales de matrículas en los accesos al Casco Viejo para controlar las entradas y salidas a esta zona con arreglo a la ordenanza de zonas de preferencia peatonal aprobada este jueves por el pleno de la corporación.

Tras resolverse 48 alegaciones ciudadanas, la nueva ordenanza ha sido aprobada con carácter definitivo con los votos a favor de los concejales del gobierno municipal (PNV-PSE), en contra del PP y las abstenciones de EH Bildu y Elkarrekin Podemos-IU.

La concejala de Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Bilbao, Nora Abete, ha destacado que con esta ordenanza se pretenden regular de forma "efectiva y racional" las zonas peatonales de la ciudad y la convivencia con los vehículos, con "total prioridad" para los viandantes en dichas áreas.

Ha explicado que la normativa solo se aplicará de forma efectiva en una primera fase en el Casco Viejo, un "espacio singular" de la villa debido a su valor patrimonial e histórico, y en cuyos accesos se han instalado ya 30 lectores digitales de matrículas, dadas las restricciones de entrada establecidas en la zona.

VECINOS Y COMERCIANTES

Los vecinos residentes y los comerciantes tendrán permitidos 48 accesos al año con vehículo, 4 al mes y con un máximo de 30 minutos por acceso.

En el Casco Viejo las operaciones de carga y descarga solo las podrán realizar furgonetas y camiones de no más de 5,5 toneladas y una altura inferior a 2,9 metros, con un límite de acceso máximo de 30 minutos al día, de 8:00 a 11:00 horas de lunes a sábado. El reparto en bicicletas, en cambio, no tiene horario.

La edil ha indicado que los dispositivos lectores de matrículas servirán para controlar las entradas al Casco Viejo y, en el futuro, para adaptar las políticas de movilidad en función de los resultados que se obtengan.

CONTAMINACIÓN ACÚSTICA

Con carácter general, la nueva ordenanza establece la prohibición de la circulación, parada y estacionamiento de los vehículos de motor en las Zonas de Preferencia Peatonal, con las excepciones de los vehículos de urgencia y servicios públicos de interés general, vehículos de transporte público colectivo, autotaxis y vehículos VTC cuando se encuentren prestando servicio, o bicicletas.

Con los límites a la circulación de vehículos el Ayuntamiento persigue también reducir la contaminación acústica y ambiental, además de aumentar la seguridad vial, especialmente para los alumnos de los centros educativos con el establecimiento de caminos escolares.