Bilbao - El Ayuntamiento de Bilbao creará una oficina de intermediación municipal del alquiler en Bilbao para movilizar las viviendas vacías existentes en la villa. Se trata de una propuesta anunciada ayer en el consejo de Viviendas Municipales después de que la semana pasada se diera a conocer el último inventario que cifra en 4.830 los pisos deshabitados de la ciudad. El Consistorio pretende ofrecer un recurso cercano de asesoramiento a los propietarios de viviendas vacías y a las personas interesadas en alquilar. El Área de Vivienda ha presupuestado una partida de 250.000 euros para la puesta en marcha de esta iniciativa que prevé lanzar en marzo.
“El objetivo es movilizar el mayor número de viviendas vacías a favor del alquiler”, reveló Goyo Zurro, concejal de Vivienda, quien presentó a los miembros del consejo un borrador abierto del proyecto para someterlo a debate, ya que la intención es “tener el mayor consenso posible en el modelo que ponemos en marcha”. Según el edil, quien expuso que “la normativa actual ofrece más posibilidades a las administraciones públicas para intervenir en el mercado de la vivienda”, el bosquejo plantea que la iniciativa tenga al menos dos años de duración, con personal estable asignado que trabaje en un espacio referente de la ciudad. A pesar de ello, se prevé que el servicio de orientación e información pueda extenderse a los centros municipales de distrito.
“Intentaremos dirigirnos a todos los propietarios de las viviendas que aparecen en el inventario como vacías o de bajo uso para ver la situación en la que están. A partir de ahí les ofreceremos el programa de intermediación más adecuado”, señaló el concejal, quien la semana pasada dio a conocer los datos sobre las viviendas vacías. Aunque la situación ha mejorado con respecto a 2016 -cuando se contabilizaron 8.096 viviendas deshabitadas-, actualmente 2.495 de las 4.830 cifradas como vacías llevan más de dos años en esa situación y, por lo tanto, serían susceptibles de que se les pudiera aplicar un canon gravando su estado. Además, hay 1.647 a las que se les podría recargar un 25% el IBI. “Nuestra finalidad es no tanto la aplicación de medidas correctivas como aplicar un canon o el recargo del IBI, sino fomentarlo medidas de carácter positivo”, declaró.
Según concretó el edil, los programas del Gobierno vasco con los que están pensando trabajar tienen un precio tasado. De esa forma, detalló que Bizigune, por ejemplo, contempla para Bilbao un precio máximo de 600 euros de alquiler, mientras que en el caso de ASAP esa cifra es de 750 euros. “A cambio, los propietarios tienen una serie de ventajas. Es la administración local la que está detrás del alquiler de la vivienda, tutelando que el uso y el mantenimiento sea correcto o que en momento de la devolución se cumplan ciertas condiciones”, señaló Zurro, quien puso en valor que el Ayuntamiento permitirá acercar estos servicios a la ciudadanía.
Se trata de una iniciativa que, de forma similar, se ha testado en otras ciudades del Estado como Barcelona, Madrid o Zaragoza, “aunque con otras atribuciones”, ya que en algunos casos solo se circunscribe a la búsqueda de viviendas por una ejecución hipotecaria, por ejemplo. Según el concejal, “es un campo bastante inexplorado y con resultados desiguales en los sitios en los que se ha puesto en marcha”. Por ello, optó por adaptar el programa a Bilbao, “la ciudad con más vivienda social en alquiler del Estado”, y su contexto.