Bilbao - El Ayuntamiento de Bilbao estudiará la posibilidad de incrementar las partidas destinadas a los festivales culturales que tienen lugar en la villa después de que el Departamento de Educación y Cultura del Gobierno vasco haya suprimido la línea de ayudas a actividades locales para 2016. Así lo garantizó ayer Nekane Alonso, concejala de Cultura del Consistorio bilbaino, quien consideró que, a pesar de los recortes, ninguno de los doce certámenes que se celebran en la capital vizcaina “está en situación de desaparecer por la retirada de esa subvención”. Asimismo, indicó que por el momento los responsables de los festivales no se han puesto en contacto con la administración municipal para mostrar su inquietud al respecto.

La edil de Cultura explicó que el próximo martes será el viceconsejero de Cultura, Joxean Muñoz, quien comparecerá en el Parlamento Vasco para dar cuenta de la supresión de 350.000 euros destinados a la celebración de festivales y actividades de teatro, música, danza o cine a nivel local que en otros años han beneficiado a cerca de 60 eventos. En cualquier caso, adelantó que el Ejecutivo de Lakua pretende “remodelar” la línea de ayudas para volver a ofrecerlas de cara al próximo año. “No se debe a un ajuste presupuestario, sino que es más una adecuación”, indicó Nekane Alonso sobre lo que considera que es una “situación coyuntural”.

Mendi Film Fest, Zinegoak, Zentsura At! o Caóstica son algunos de los eventos que se quedarán sin subvención del Gobierno vasco. Sin embargo, según la concejala bilbaina, “los doce festivales reciben ayuda municipal, algunos incluso de otras áreas -Igualdad, Bilbao Ekintza...- además de Cultura”. En ese sentido, cabe destacar que la contribución económica del Ayuntamiento de Bilbao (340.700 euros en 2016) es en todos los casos particulares superior a la realizada por Lakua (83.496 euros en 2015): sirve de ejemplo a escala pequeña la aportación a Loraldia (180.000 euros municipales en 2016 frente a 11.188 euros del Gobierno vasco en 2015) o a Zinegoak (9.000 euros frente a 5.026 euros). A pesar de que la concejala se comprometió a estudiar la posibilidad de aumentar las partidas municipales si hiciera falta, expuso que “en ningún caso” se va “a compensar al 100% lo que han dejado de recibir”. Por ello, apeló a la colaboración público-privada como vía para asegurar la sostenibilidad de los festivales que tienen lugar en la villa.

Falta de previsión Durante la comparecencia, celebrada a petición de EH Bildu, Alba Fatuarte, concejala de la coalición abertzale, solicitó la realización de un diagnóstico a nivel municipal para analizar el impacto de los recortes en los festivales bilbainos. Además de denunciar la sospecha de que la partida presupuestaria se haya destinado a la celebración de otros eventos como la capitalidad cultural de Donostia 2016, criticó la falta de información aportada por el Gobierno vasco a los responsables de los festivales: “No se ha avisado. Muchos han entrado en gastos que no van a poder asumir pensando que iban a recibir la ayuda”, expuso Fatuarte. Por su parte, Conchi García, concejala de Goazen Bilbao, cuestionó si no se podía haber remodelado la línea de ayudas sin que ello supusiera su eliminación.

Tras conocer la supresión de las subvenciones, Imanol Garaizabal, responsable del festival BreakOnStage, coincidió con la oposición en que “la noticia se ha comunicado muy tarde”. Por ese motivo, indica que de cara a la celebración de la próxima edición del certamen de cultura urbana se han visto obligados a “ajustar gastos de última hora”. En palabras de Garaizabal, la aportación del Gobierno vasco ha ido disminuyendo en los últimos años, hasta llegar a los 2.013 euros en 2015. Aunque este año no reciban nada desde Lakua, asegura que en su caso “la continuidad del festival no está en peligro, lo que queda un poco más reducido es el margen de contratación”.