BILBAO. En una comisión municipal, el concejal de Obras y Servicios de la capital vizcaína, Ricardo Barkala, ha recordado que uno de los objetivos del equipo de gobierno es incrementar las actividades que se llevan a cabo en el cauce del Nervión-Ibaizabal y que el proyecto de la terraza sobre los vestigios del viejo cargadero "está muy bien".

El edil ha explicado que el Ayuntamiento no ha tenido ninguna intervención en la autorización para levantar la terraza sobre la ría, ya que se trata de una concesión de dominio marítimo terrestre cuya competencia es de la Dirección de Costas de la Administración central.

La autorización para la terraza se concedió en 2013 para un período de 15 años.

Ante las dudas planteadas por algún grupo municipal de la oposición, como EH Bildu, sobre la construcción de esta terraza "encima de unos restos del pasado industrial", el concejal de Planificación Urbana, Asier Abaunza, ha indicado que los restos del cargadero no disponen de "ningún tipo de protección por ninguna administración".

En un comunicado, la asociación Olabeaga Bizirik ha denunciado la "destrucción irreparable" de los restos del antiguo cargadero para la ampliación de un negocio hostelero privado y ha criticado la "pasividad" del consistorio.

Días atrás, la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública (AVPIOP) rechazó también la destrucción de los vestigios del antiguo cargadero