Bilbao - El Ayuntamiento de Bilbao continúa su apuesta por los contenedores soterrados para lidiar con uno de sus principales caballos de batalla como es el reciclaje. Después de solucionar los problemas ocasionados por los compactadores bi materiales (para dos tipos de residuos) instalados como prueba piloto en las calles Ledesma y Marqués del Puerto modificándolos para depositar un solo residuo, el Área de Obras, Servicios, Rehabilitación Urbana y Espacio Público anunció que instalará los próximos depósitos de residuos bajo tierra en Sabino Arana y Zabala. Con la puesta en marcha de estos dos, la villa contará con 16 contenedores soterrados. Sin embargo, todos ellos serán para un solo residuo puesto que la tecnología disponible no ha permitido, por el momento, solucionar los problemas de descompensación que se generan en los contenedores soterrados para la recogida de dos residuos diferentes.
Tal y como explicó Ricardo Barkala, coordinador de Políticas de Sostenibilidad y Desarrollo Urbano, en 2009 y 2010, aprovechando las peatonalizaciones de ambas calles, se implantaron compactadores soterrados en Ledesma y Marqués del Puerto para la recogida de residuos como papel cartón y fracción resto. Con el fin de ocupar el menor espacio posible, como prueba piloto, se optó por hacerlos del tipo bi material: con dos buzones (uno para fracción resto y otro para papel cartón) que tras su compactación repartían los residuos en cajones divididos. Entre los problemas generados con este sistema, Barkala citó atascos al introducir los residuos, descompensación de peso en la plataforma de elevación así como en la carga durante su transporte u obstrucción del cartón que quedaba aprisionado.
Después de que la oposición manifestase sus dudas respecto al funcionamiento de los contenedores compactadores para dos residuos y comprobar que la prueba piloto no ofrecía los resultados esperados, los compactadores de esas dos céntricas calles de la villa, a pesar de tener dos buzones, se utilizan para un solo residuo desde hace aproximadamente un año. “La conclusión es que, mientras la tecnología disponible en el mercado no evite los problemas descritos se utilizarán soterrados mono compartimentados”, expuso Barkala sobre esta cuestión.
A pesar del elevado precio de la instalación de los contenedores soterrados (unos 200.000 euros por unidad), que varía dependiendo de la dificultad de su implantación, el coordinador de Políticas de Sostenibilidad y Desarrollo Urbano enumeró las bonanzas de estos depósitos que permiten “reducir el volumen de los residuos” en “zonas donde hay una gran producción”. Entre las ventajas destacan el hecho de que permiten que las recogidas sean más dilatadas en el tiempo -“en Bilbao según la zona puede ser entre una o dos semanas”-, cada compactador puede sustituir a una media de 10 o 20 contenedores en superficie, la estética y la higiene, una integración más armoniosa en la trama urbana y que estén dotados de más seguridad.
Concienciación Según Ricardo Barkala, actualmente las cifras de reciclaje que maneja el Ayuntamiento de Bilbao rondan “el 29% en origen (el porcentaje de residuos que los ciudadanos depositan en los correspondientes contenedores) más el 40% en las Plantas de Tratamiento Mecánico-Biológico, por lo que el total se acerca al 70%”. Una cifra que no convence a la oposición, que insiste en que se debe reciclar más. Para ello, concienciar a la ciudadanía es primordial y en esa contienda se encuentra el Consistorio a través de iniciativas como Reciclaberinto, la instalación dispuesta en El Arenal hasta el jueves, que promueve la sensibilización medioambiental.
Entre los obstáculos que impiden aumentar el porcentaje de reciclaje, Barkala mencionó las dificultades que ocasiona el contenedor de fracción resto. “Ahí se suele echar cualquier cosa, por lo que en destino se recicla aparte, lo que supone que sea mucho más caro”, indica el edil, quien considera que el Ayuntamiento es el principal interesado en la sensibilización. “El objetivo es concienciar a la gente de que el contenedor de fracción resto vaya el mínimo volumen posible. Hay posibilidades suficientes de reciclaje en origen, de contenedores y de garbigunes, por lo que el contenedor de fracción resto debería ser residual”, añadió antes de admitir que “hoy por hoy no lo es”.
En lo que respecta a las próximas actuaciones para mejorar el sistema de reciclaje, Barkala asegura que el Consistorio se encuentra actualmente articulando el pliego de condiciones de la próxima adjudicación de recogida de residuos, en el que tratarán de ampliar el quinto contenedor (destinado a materia orgánica) que actualmente se encuentra en marcha en Deusto como experiencia piloto. “Cada zona merece un tratamiento diferenciado, también pretendemos implantar la experiencia del quinto contenedor en el resto de Bilbao. Es el momento de identificar cuántos contenedores se van a poner y dónde”, indicó el concejal, que hoy mismo tiene previsto presentar la ampliación del quinto contenedor a todo Deusto y a parte de Uribarri.
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