Bilbao - Joseba Salinas Martín se encontraba trabajando ayer cuando el jurado le comunicó que su propuesta había sido elegida como cartel de Aste Nagusia 2015. ¡Quién le iba a decir a él que un proyecto que comenzó siendo una camiseta para su hija de tres años acabaría adornando las calles de su Bilbao natal para anunciar la Semana Grande! Ayer, finalmente, el público pudo poner cara al autor del trabajo Aste Nagusi Ikusgarria. “Se me ocurrió hacerle una camiseta a mi hija y a partir de ahí fui desarrollando el boceto”, contó Joseba.
A este técnico audiovisual no le resultó nueva la experiencia de intentar dar imagen a la semana de fiestas bilbaina. Sin embargo, su participación durante otros años no resultó tan exitosa como en esta edición. A pesar de no quedar en otras ocasiones entre los seis finalistas, Joseba aseguró haber tenido “alguna vez” expuesto el cartel.
En la carrera por retratar Aste Nagusia, el ganador ha tenido que enfrentarse en esta edición a más de 170 trabajos provenientes de varias partes del Estado. Lejos de resultar sencillo, Joseba Salinas admitió haberle dado “muchas vueltas” al proyecto. La multitud de colores de su cartel frente al estilo de otros define la pluralidad que, como explicó ayer Itziar Urtasun, concejala de Fiestas, “refleja lo que es Aste Nagusia”. Precisamente, la visión de Joseba de estas fiestas es la de un periodo “colorido”, razón por la que su trabajo resulta tan llamativo.
Premio
Tal y como anunció Itziar Urtasun al comienzo de esta competición, el ganador recibirá una retribución de 3.000 euros. Joseba se mostró agradecido por este premio, aunque reconoció no estar acostumbrado a compensaciones “de este tipo”. No obstante, no pudo evitar bromear cuando le preguntaron qué pensaba hacer con el dinero recibido: “El dinero del premio lo aprovecharé para gastármelo en Aste Nagusia”.
Lejos de los tópicos sobre qué es lo importante en una competición, el ganador aseguró que el objetivo al presentarse siempre fue ganar, aunque también tuvo que admitir que la decisión le pilló totalmente por sorpresa. Tanto fue así que el su hija finalmente se quedó sin su camiseta, aunque Joseba no tardó en garantizar que “después de esto” no tardaría en diseñársela; aunque el sentimiento que más destacó Salinas fue el orgullo. Desde hoy las calles quedarán adornadas con el cartel de Joseba Salinas, quien contó ayer que no podrá evitar mirarlo y afirmar con mucha satisfacción: “Esto lo he hecho yo”. - E. Nafarrate