BILBAO - El balance de las cuentas del Ayuntamiento de Bilbao referidas a 2013 muestra una situación financiera saneada, sin deuda y con capacidad para afrontar los imprevistos que pudieran surgir, según dio a conocer el interventor del Ayuntamiento de Bilbao a los grupos de la oposición en la comisión de economía que se celebró ayer. El documento se remitirá al Tribunal Vasco de Cuentas para que pueda fiscalizar las números del consistorio. "En este momento, Bilbao tiene 30 millones de euros de remanente no dispuestos, capacidad de pagar a sus proveedores en 26 días y tenemos detectadas todas las incertidumbres económicas en el largo medio plazo. Solo con los remanentes no dispuestos tendríamos capacidad para atender la pérdida de todos los juicios pendientes", señaló Andoni Aldekoa, coordinador de Economía y Planificación del consistorio. En junio, el equipo de gobierno jeltzale comenzará la elaboración del presupuesto para 2015.
Los litigios
"Bilbao cumple con los objetivos de estabilidad, deuda y gasto", según dijo ayer el interventor del Ayuntamiento de Bilbao. La radiografía de las cuentas es el reflejo de una situación saneada cuyo objetivo en este ejercicio es no endeudarse. En este sentido, Aldekoa señala que "el Ayuntamiento tiene controlados incluso los imprevistos". Se refiere a que cuenta con un remanente de 30 millones de euros que le permitirían hacer frente al peor de los escenarios. Es decir, si perdiera todos los litigios pendientes, tendría capital suficiente para sufragar los gastos ocasionados, porque en total suman 5 millones de euros. Los diez litigios en curso ante tribunales de justicia suman una cuantía de 37 millones de euros. Sin embargo, el grueso de los pleitos se refieren a los casos de Iparlat y Panera, ya en curso y presupuestados, por lo que únicamente quedarían pendientes, como riesgos potenciales, 5 millones de euros. Si perdiera y tuviera que afrontar el pago, el Ayuntamiento quedaría con saldo positivo.
Algunos pleitos llevan años sin resolución como el justiprecio por desahucio de la estación de servicio en la calle Ribera o la reclamación de honorarios por la dirección de obra en el conservatorio de música. La mayoría son cuestiones urbanísticas, aunque también se encuentra un pleito valorado en 216.294 euros, por una caída en la vía pública. Hay otros 22 recursos pendientes, pero estos son cuestiones de menor relevancia cuya cuantía aún no se ha determinado.
Otro de los apartados que explicó el interventor se refiere a las cuentas pendientes con Bilbao Ría 2000. Con cargo a este año se abonarán los 7,6 millones de aprovechamientos urbanísticos por la torre Iberdrola. El Ayuntamiento, y el resto de instituciones con participación en la sociedad pública, avalaron dos operaciones por las que, a día de hoy, el Consistorio tiene un riesgo de 23 millones. "La previsión es que hasta 2017 siga vendiendo solares y se vaya reduciendo ese crédito con los bancos", señaló Aldekoa, que confía en que sea el propio Iberdrola el que gracias a la venta de sus parcelas pueda hacer frente a su deuda.
CONCEJALES
Además, el ayuntamiento tiene una reserva de 5 millones de euros procedentes del remanente de tesorería para gastos generales, con los que dar cumplimiento a lo establecido en el decreto ley por el que las cantidades derivadas de la supresión de la paga extraordinaria se destinarán en ejercicio futuros a realizar aportaciones a planes de pensiones.
"El próximo año no hay ingresos atípicos, por lo que el presupuesto de 2015 puede volver a ser más austero. Pero, a día de hoy, podemos garantizar que el cierre del mandato va a ser con unas cuentas saneadas y atendiendo a los compromisos", apuntó Aldekoa. 2015 no será un año de nuevos proyectos aunque es probable que se inicie la comisaría de Garellano.
Además, con la nueva corporación, el número de concejales liberados en el Ayuntamiento de Bilbao tendrá que redimensionarse, puesto que el número máximo permitido en la villa es de 20. Con el Estatuto de la Oposición que aprobaron los grupos en la capital hay 25 consolidados y cuatro con dedicación parcial. En estos momentos, por tratarse de un Ayuntamiento saneado se le ha permitido la situación actual hasta las próximas elecciones. En cuanto al número de asesores, Bilbao podría tener 24 cargos, pero solo tiene 15 ocupados.