BILBAO. Estos trabajos tienen un presupuesto de 245.482 euros e incluyen la construcción de 443 metros de acera y la instalación de semáforos ya que se trata de una zona de tráfico intenso, según ha informado el consistorio baracaldés.
Según los tiempos previstos por el ayuntamiento, y una vez que se adjudique la obra, los trabajos empezarán a finales de octubre y tendrá un plazo de ejecución de cuatro meses.
Para llevar a cabo esta actuación se firmó previamente un convenio de colaboración con la Diputación Foral de Bizkaia, que incluía la cesión de parte del suelo y una subvención de 100.000 euros.
Hasta que se construya este nuevo itinerario peatonal en superficie, los túneles de Lutxana permanecen cerrados de 22.30 a 6.30 horas, período de tiempo en el que se registra menor tránsito peatonal y la oscuridad favorece las actuaciones delictivas.
El problema de seguridad de los túneles de Lutxana se remonta a hace treinta años cuando se construyeron grandes infraestructuras que pasan por Barakaldo y que dan servicio a todo Bizkaia, como son la autopista A-8, La Avanzada, el nudo de Cruces y el puente de Rontegi, según recuerda el consistorio.
Entonces, la Diputación y el Gobierno Vasco decidieron construir unos túneles para comunicar peatonalmente el casco urbano con el barrio de Lutxana, en los cuales se han registrado numerosos asaltos, principalmente a mujeres.
Durante este tiempo, la Policía Municipal ha reforzado la vigilancia de estos pasos soterrados y se han colocado espejos y luminarias que garantizan la visibilidad.