Bilbao. Desde hace algo más de un mes, Maite Pascual tiene una nueva rutina nada más levantarse de la cama: asomarse a la ventana y ver cómo está el agujero que ha surgido en un solar frente a su edificio. Los vecinos de cuatro portales de la calle Tomás Zubiria Ibarra están más que preocupados por el enorme socavón que ha aparecido junto a sus viviendas, en las que también han surgido grietas, y que, aseguran, cada vez se hace más grande. "Todavía nadie nos ha dicho qué lo ha producido ni si supone un riesgo", advierten.
El socavón, cuya boca mide tres por dos metros, aproximadamente, ha surgido en una pequeña parcela frente a los edificios conocidos como Panera, entre la avenida Zumalakarregi y Maurice Ravel. Un equipo de bomberos se desplazó el 1 de mayo hasta el lugar y revisó el agujero. Tras la inspección, los técnicos acordonaron y vallaron la zona, muy cercana al colegio público Zurbaran. Los vecinos aseguran que el agujero, que creen que tiene una profundidad de entre 10 y 12 metros, se ha ido haciendo cada vez más grande; dicen que las rejas que lo cubren, que ahora apenas se apoyan en las esquinas, lo tapaban por completo hace menos de un mes.
Los vecinos sospechan que las obras de la línea 3 del metro, que atraviesa por debajo las viviendas, han podido provocar el socavón. "Yo no puedo asegurar que haya sido por las obras; solo sé que ese agujero antes no estaba y ahora, sí", asegura Fernando Sanz, un vecino del octavo piso del portal número 12. Carlos Ruiz, presidente de la asociación Gure-Etxea, está convencido de que esta es la causa. "La trayectoria del metro que va a Matiko pasa justo por debajo", explica.
Sin embargo, desde la dirección del suburbano les han negado que los trabajos de las galerías estén detrás de la aparición del agujero. Fuentes de ETS, la empresa pública dependiente del Gobierno vasco que se hace cargo de la construcción del suburbano, han negado a este periódico que el socavón tenga relación con los trabajos y lo han achacado a un "problema de aguas" del Ayuntamiento de Bilbao. Pese a ello, está estudiando junto al Consistorio bilbaino -que sigue con atención la evolución del incidente- las causas que han motivado la aparición del socavón, las afecciones que puede tener y qué soluciones se pueden plantear.
"Todavía es pronto para saber qué lo ha provocado. Por lo tanto, para descartar cualquier motivo, lo estamos analizando", afirman desde el área municipal de Obras y Servicios.
De momento, y mientras prosiguen los estudios para saber qué ha provocado el socavón, ambas instituciones colaborarán para rellenar el agujero, trabajos que ejecutará ETS. Una medida que no ha satisfecho del todo a los vecinos. "Es poner un parche, no es la solución; lo que hace falta es saber qué es lo que se está llevando la tierra", reclama una de las residentes del portal número 12, Garbiñe Campo. "Alguien tiene que venir a solucionarlo".