Bilbao. Recién terminadas las fiestas de Bilbao y con las cenizas de Marijaia aún humeantes, toca hacer balance, aunque de forma extraoficial. En general, la apreciación de las comparsas es que Aste Nagusia ha sido un éxito en cuanto a asistencia y participación. "La valoración previa es que han sido unas fiestas muy buenas. Han sido muy bonitas desde el principio, el tiempo ha acompañado. Ya desde el pregón fue una pasada toda la gente que había en la ciudad", afirmó ayer Itziar Villafáñez, portavoz de Bilboko Konpartsak.
Villafáñez recordó también que a pesar de haber sido unas fiestas "muy bonitas", como el año pasado, para las comparsas ha sido una Aste Nagusia "diferente, en defensa del modelo festivo". "No hay que olvidar que todavía no estamos en la situación que quisiéramos. Ha habido dos comparsas que no han podido montar txosna, pero creemos que esta situación se va a encauzar, vamos a mejorar y entre todos vamos a hacer Aste Nagusia mejor". "Esperamos que el año que viene sea una Aste Nagusia redonda. Lo que queremos son compromisos no palabras, pero por lo menos las declaraciones del Ayuntamiento van tomando sentido y su actitud parece distinta", reafirmó la portavoz.
Los comparseros comparten el buen sabor de boca que han dejado las fiestas. "En general han estado muy bien, ha habido muy buen ambiente; mucha gente a todas horas. La gente ha estado animada y ha respondido bien", explicó Ana Pichel, miembro de Pinpilinpauxa. Para Jose Mari Amantes, miembro de Moskotarrak, "la participación ha sido muy importante durante estas fiestas. Se ha notado más gente sobre todo el jueves y viernes".
El punto negativo, una vez más, lo pusieron los robos y las agresiones. "Ha sido una pasada todas las agresiones que ha habido, tanto sexistas como homófobas, y de otros tipos: robos o navajazos. Eso empaña una Aste Nagusia que ha sido muy bonita y deja un poco de mal sabor de boca", afirmó Villafáñez.