Bilbao. Cuando se pensó en Miribilla para acoger el Bilbao Arena, ¿se tuvo en cuenta los problemas de aparcamiento?

Se estudia con todas y cada una de las infraestructuras. De hecho, con San Mames Barria surgió el mismo debate. Se escogió la ubicación por la centralidad, la proximidad de servicios y la oportunidad del suelo.

¿No tienen previsto construir un aparcamiento de rotación?

No. Con ello, el mensaje que lanzas es que no hay problema en ir con coche porque ya hay dónde dejarlo. Se debe usar transporte público porque no hay calle que pueda soportar semejante densidad de tráfico. En ninguna infraestructura céntrica se plantea hacer un parking. San Mames no va a tenerlo y el Bilbao Arena, tampoco.

Se ha comparado al Bilbao Arena con el Buesa Arena. ¿Qué le parece?

Pero el Buesa Arena no está dentro del casco urbano de Gasteiz. No está a cinco minutos de la plaza de los Fueros. Por lo tanto, necesita ese aparcamiento y la red de transporte público no es la que tiene el Bilbao Arena.

¿Hay que dejar el coche en casa?

Es mucho más cómodo. De Moyúa al Arriaga existe la misma distancia que de la plaza de Unamuno al Bilbao Arena. Es un recorrido que hacemos todos cuando vamos de compras por Bilbao.

¿Estas nuevas medidas se mantendrán para el acceso al frontón?

Renfe cercanías nos ha confirmado que contempla también los refuerzos de lanzadera hacia Miribilla para la apertura del frontón igual que para el caso del Bilbao Arena. Y nosotros también reforzaríamos, en el caso de ser necesario, las líneas de Bilbobus. Pero es un caso diferente, se trata de menos gente.

¿Las quejas de los vecinos de Miribilla con respecto al aparcamiento son desmesuradas?

La reclamación de falta de estacionamiento en Miribilla era mucho anterior a la construcción del pabellón. Nosotros vamos a seguir trabajando con ellos en la búsqueda de una solución, pero es independiente a la apertura del Bilbao Arena. Su problemática no es diferente a la que sufren los vecinos Indautxu o Basurto cuando juega el Athletic.