Bassala Bagayoko (10-IX-2006, Bamako) hizo historia en abril de 2021 al convertirse en el jugador más joven en debutar en la ACB con 14 años, siete meses y 15 días, arrebatando tal condición ni más ni menos que a Ricky Rubio. El pívot maliense de 2,09 metros era una gran promesa que fue progresando a pasos agigantados en las filas del Fuenlabrada hasta que el 5 de noviembre de 2022 sufrió la rotura del ligamento cruzado anterior y el menisco externo de su rodilla derecha. Desde entonces, no ha vuelto a saltar a cancha en partido oficial.
El pasado verano, el Surne Bilbao Basket decidió apostar por él como pieza importante de futuro con un contrato por cuatro temporadas. Tras meses de trabajo individual, tanto físico como técnico, Jaume Ponsarnau ha anunciado este martes que Bagayoko ha entrado ya en dinámica de grupo en los entrenamientos de los ‘hombres de negro’. Ahora el club deberá decidir los pasos a dar con él para que vaya recuperando la dinámica competitiva tras tanto tiempo apartado de la actividad. Se cuenta con él para que pueda disputar minutos en competición europea como complemento a una cesión que vuelva a ponerle en actividad constante de partidos. Incluso no se descarta que entre en la convocatoria en el duelo de mañana ante el Sassari.
“Ya veremos qué ocurre con Bassala”, ha apuntado Ponsarnau. “De momento queremos conocerle y ayudarle a que vuelva a ser jugador de baloncesto. Nos encanta trabajar con él. Tiene muy buena actitud y está muy ilusionado después de que ayer fuera su primer día en dinámica absolutamente normal”, ha añadido.
CARACTERÍSTICAS
En estos años alejado de los focos, el pívot de 18 años ha seguido aumentando centímetros a su andamiaje, por lo que habrá que comprobar en qué tipo de jugador se ha convertido. “Para nuestro sistema defensivo, Bassala sería más un ala-pívot que un pívot, pero en ataque tiene cosas intermedias”, ha desgranado el técnico catalán, añadiendo que “lo que más vemos es que disfruta en cancha; que con todo lo que ha pasado saque esas sonrisas… Es muy querido en el grupo, sigue las dinámicas, encaja bien las bromas… Hemos podido ver que tiene cosas innatas de intuición competitiva y ha estado haciendo un muy buen trabajo técnico con Ibon López de Letona”.