El Bilbao Basket tiene otra oportunidad de caminar hacia la tranquilidad, una más en un tramo del calendario en el que afronta cada partido sobre el filo de una navaja mental, pese a que a punto de cerrar la primera vuelta lleve dos partidos de ventaja sobre los puestos de descenso. La cuestión es que ha desaprovechado tantas situaciones favorables que cada partido en casa se está afrontando con escaso margen de error y con una presión excesiva a estas alturas. Y hoy llega un Baxi Manresa convertido de nuevo en revelación, en el mejor de los modestos de la Liga Endesa que depende de sí mismo para meterse en la Copa. Lo hará con una victoria y quizás también con una derrota corta.
Los hombres de negro van a tener que mostrar su mejor versión en los dos lados de la cancha para frenar a un rival que siempre busca meter los partidos en un ritmo alto y que en su último partido fuera de casa ganó en el Palau Blaugrana. No es un choque, por tanto, para espíritus pusilánimes ni jugar con todas las dudas que el Bilbao Basket ha mostrado en muchos de sus compromisos recientes cuando ha llegado la hora de resolverlos a su favor. Carácter y determinación son dos palabras que viene repitiendo Jaume Ponsarnau y que tienen que entrar en la cabeza de sus jugadores para salir del atolladero. Solo a partir de ahí llegará el acierto que se necesita para sumar victorias en una competición que las pone muy caras.
El Manresa, que solo ha ganado una vez en 16 visitas a Bilbao, anota 85 puntos por partido, es el mejor equipo en el rebote de ataque y el segundo que más triples anota. Su jugador más destacado dentro de una propuesta coral está siendo Devin Robinson, pero varios jugadores pueden destacar como el canterano del Barça Brancou Badio, el base Dani Pérez o el pequeño Brandon Taylor.
