El primer mes de competición no está siendo sencillo para Emir Sulejmanovic. Disponer de escasísimos minutos durante el Eurobasket y no poder hacer la pretemporada con el Surne Bilbao Basket entorpeció su puesta a punto, impidiéndole desarrollar su característico juego de garra, entrega y pundonor. Admite que en los últimos encuentros va recuperando sensaciones y piensa que tanto él, pese a las molestias en su tobillo izquierdo, como sus compañeros estarán preparados para presentar batalla el domingo en Miribilla ante el Cazoo Baskonia.

“Estoy llegando a ser el Sulejmanovic que quiero, en los últimos partidos me he sentido mucho mejor. No es fácil volver a entrar en dinámica después de haber estado un mes casi sin jugar con la selección. Los primeros encuentros fueron difíciles y frustrantes en lo referente a lo que yo me pido a mí mismo para ayudar al equipo. Entreno a diario para ello, viniendo antes de los entrenamientos y quedándome más tiempo para coger el ritmo competitivo y hacer las cosas mejor”, ha apuntado este miércoles, lamentando que “el tobillo lo tengo a veces mejor y a veces peor, pero no hay tiempo para quejas. Estamos viendo qué partes de los entrenamientos puedo hacer para poder trabajar viernes y sábado a tope y jugar el domingo”.

Para el ala-pívot bosnio, la clave en la mejora del equipo tras las dos últimas derrotas en la Liga Endesa contra Granada y Breogán debe residir en “hacer las cosas bien desde el minuto uno, saliendo centrados y con confianza”. En este sentido, ha reconocido que “la derrota del pasado sábado en Lugo fue parecida a la de Granada. Les dejamos coger ritmo y entrar en una dinámica buena, cogieron confianza y luego los tiros les entraron. Hubo un momento en el que nos acercamos, pero nos vinimos abajo otra vez. Hay que aprender a jugar de otra manera fuera de casa”.

Sobre el derbi del domingo, ya sabe que “se trata de un partido especial. Ellos vienen en un muy buen momento y además han incorporado a un muy buen jugador (Pierria Henry). Pero lo más importante es centrarnos en nosotros mismos y asimilar los errores para que no se vuelvan a repetir”. La defensa, según ‘Sule’, será la gran clave de la contienda, ya que “cuando les dejas jugar a su ritmo es imposible pararles. Habrá que entorpecer su juego en transición, que no puedan hacer tiros rápidos, usar bien las faltas… Les respetamos, pero queremos ganar. Para ello, tendremos que estar concentrados al 100% desde el minuto uno porque de su calidad no hace falta ni hablar”.

Withey pide “más dureza”

Por su parte, Jeff Withey tampoco ha escondido que el equipo no ofreció su mejor versión en los dos últimos compromisos de la competición doméstica: “Han sido un par de partidos difíciles en los que teníamos que haber sido más duros y jugar con más energía. Es bueno haber tenido ahora una semana para prepararnos y seguir conjuntándonos porque es un partido importante para nosotros”.

El pívot estadounidense es consciente de lo especial que es el derbi vasco para la ‘marea negra’ y añade que “también lo es para nosotros. Llevamos dos derrotas seguidas y queremos ganar. Tendremos el pabellón lleno y aunque sabemos que el rival es un muy buen equipo queremos darlo todo. Más allá de ganar o perder, queremos demostrar a nuestra gente que vamos a pelear y a darlo todo”. Para ello, subraya que “tenemos que arrancar con agresividad y energía. Jugar en casa te ayuda a hacerlo porque la tu gente te aporta confianza. Va a ser un choque duro y difícil, pero estaremos preparados”.

En el plano personal, el pívot firmó en Granada su récord anotador en Liga Endesa, con 21 puntos (en Lugo conquistó el de valoración, con 26 créditos), y reconoce atravesar por un buen momento de juego, pero se ve con margen de mejora. “Me encontré bien en ese partido. En ataque tuve mucha confianza, pero puedo aportar más en defensa y en rebote. Además, aunque juegues bien nunca estás del todo satisfecho. Siento que necesitaba un partido así para coger confianza y seguir mejorando. No soy nada conformista”, ha apuntado.