Los Milwaukee Bucks se convirtieron en los campeones de la segunda edición de la NBA Cup y suceden en el palmarés a Los Angeles Lakers. Las Vegas acogió de nuevo la final y el torneo, que sigue sin generar gran ambiente en la lujosa ciudad, acabó con sorpresa (97-81). Los Oklahoma City Thunder llegaban como mejor equipo de la Conferencia Oeste, con un 80% de victorias, y su rendimiento defraudó en un choque en el que se impuso la defensa de los de Wisconsin, que pese a que fueron campeones de la NBA en 2021 llevaban una temporada discreta hasta ahora.
Los Thunder, con unos horribles porcentajes de tiro desde el triple (5 de 32) se quedaron en solo 31 puntos en la segunda parte y no pudieron con la exuberancia de Giannis Antetokuonmpo, que firmó un triple-doble (26 puntos, 19 rebotes y 10 asistencias) fue elegido MVP. El griego se apoyó en Damián Lillard para armar un ataque equilibrado y su defensa fue capaz de contener a su rival y obligarle a hacer malos tiros. Shai Gilgeous-Alexander tuvo un papel discreto y tampoco desde el banquillo aparecieron jugadores resolutivos.
“Teníamos este reto como equipo y lo logramos. Estoy muy feliz por los chicos, por Dame (Lillard). Este es nuestro primer título juntos y seguiremos creciendo. Tenemos todo para competir contra los mejores. Los últimos partidos hemos jugado un gran baloncesto, nuestra defensa ha crecido. Con el tiempo vamos a seguir creciendo y podemos llegar lejos en los play offs”, resumió Anteto tras un triunfo que para los Bucks ha sido una reivindicación.