“El club está de nuevo en una dinámica positiva y me apetecía formar parte”

bilbao - Hace ya 18 años que Raúl López jugó su primer partido en la Liga ACB. Pese a llevar media vida como profesional, el base de Vic asegura que aún le motiva competir.

Después de varias semanas de reflexión, al final decidió seguir.

-Sí, tenía ciertas dudas, normales cuando llegas a una etapa de tu carrera en la que influyen muchos factores a la hora de tomar decisiones. Al final, estoy contento de estar aquí y afrontar una temporada nueva con la misma ilusión de siempre y esperando que salga todo bien.

¿La opción era dejarlo o seguir en Bilbao o existía la posibilidad de seguir su carrera en otro lugar?

-Desde el principio, era seguir en el Bilbao Basket o dejarlo. He viajado bastante, he tenido la oportunidad de estar en muchos sitios, algo que me ha encantado, pero ahora la prioridad era estar aquí o se acababa.

¿En la balanza ha puesto factores deportivos, físicos, sentimentales, económicos...?

-Sí, un poco de todo. Pero lo primero era el estado físico, saber si podía seguir afrontando otra temporada con el nivel de exigencia que hay. Siempre es lo que me genera más dudas al empezar, pero ahora mismo me encuentro con fuerzas de seguir un año más y espero que salga todo bien.

El hecho de que la pasada temporada fuera positiva, ¿ha sido un aliciente para querer seguir?

-Sí, la temporada pasada fue ilusionante. El club está creciendo de nuevo, en una dinámica positiva y me apetecía formar parte de ello.

El año pasado se puso el listón alto y en este toca volver a construir un equipo competitivo. ¿Puede ser uno de los mayores retos de su carrera?

-Todas las temporadas han sido iguales desde que empecé a jugar. Siempre tengo ganas de aportar, de querer hacer las cosas bien, independientemente de lo que rodea al club. La pasada temporada fue difícil para todos, pero en esta partimos con una ventaja en el sentido de que el club está mejor y todo parece que va hacia el camino que queremos todos.

Se está hablando de la posibilidad de que continúe en otras labores dentro del club cuando termine su carrera como jugador.

-El club sabe que estoy encantado en esta ciudad y en el Bilbao Basket. Si los responsables entienden que les puedo ayudar en algún sentido, es algo que se podría mirar, pero ahora mismo hay que centrarse en la temporada, tratar de que todo siga por la línea que lleva de seguir creciendo y lo que ocurra más adelante, ya se verá.

¿Usted aún piensa como jugador?

-Por supuesto, por eso estoy aquí. Si no tuviera esa mentalidad, esas ganas de querer ayudar al equipo a conseguir los objetivos, no estaría aquí. Está claro que cada año que pasa no tienes el mismo peso, pero lo importante es siempre ayudar en lo que se pueda.

Este verano han renovado usted, Gabriel, Cabezas, Berni, Felipe... ¿Eso habla bien de su generación o mal de quienes deben quitarles el sitio?

-No lo sé, cuando llevas tanto tiempo haciendo lo que te gusta y seguramente lo único que sabes hacer, es difícil encontrar el momento de acabarlo. Nunca sabes cuál es, pero va a llegar. Ahora todos nos cuidamos más y eso hace que podamos seguir compitiendo, seguramente en diferentes roles de lo que tuvimos cuando éramos más jóvenes. Pero cuando te gusta esto, te adaptas a lo que haga falta y te pidan en cada circunstancia.

Aquí siguen usted, Mumbrú y Hervelle, un trío que ha imprimido un sello distintivo al Bilbao Basket.

-Antes que nada, somos afortunados por el hecho de poder jugar juntos y hacerlo en Bilbao. Más allá de la relación laboral que nos une, somos amigos desde hace mucho tiempo y lo seguiremos siendo cuando dejemos de jugar. Esto es una suerte que no todo el mundo puede tener. Si, además, podemos ayudar a la gente joven a que entienda lo que supone jugar aquí, lo que quiera la gente, es algo que vamos hacer sin duda.

Van a cumplir los tres juntos cinco años de fidelidad al club, algo poco habitual en estos tiempos. Pero alguien deberá recoger su testigo.

-Claro, nosotros, tarde a temprano, vamos a estar fuera, pero el club está haciendo las cosas necesarias para seguir siendo competitivo y que haya siempre buenos equipos, al margen de quienes formen la plantilla. Queremos que la gente siga disfrutando, que se ilusione con los que están y con los que puedan venir. Personalmente, confío en que Tobias Borg va a hacer un gran año y dará que hablar.

¿Cómo interpreta que Quino Colom destacara la importancia que usted tuvo en su gran campaña pasada, que Clevin Hannah esté deseando compartir puesto con Raúl López?

-Bueno, supongo que eso es por llevar tanto tiempo en la liga... No sé, yo no hago nada especial, solo intento ayudar a todos los compañeros. Lógicamente, la posición de base es la que más controlo y si puedo colaborar a que ellos jueguen bien, esto nos va a beneficiar a todos. Hace tiempo que dejé de pensar en lo que es mi aportación personal y solo me importa que el equipo funcione y para eso todo el mundo tiene que estar enchufado, motivado, con ganas y con confianza.

Esta temporada el equipo vuelve a Europa. ¿Puede ser una carga o, al contrario, debe ser un estímulo?

-Todo lo que sea jugar me parece bueno. Es lo que me divierte y si es en Miribilla, mejor. Me gusta tener el objetivo de llegar lejos en una competición, lo veo de una forma positiva.