bilbao. El Bilbao Basket llegará a la última jornada de la primera vuelta con posibilidades de disputar la Copa. Son muy pocas, pero después del 0-5 inicial confirman la recuperación del equipo bilbaino que ha ganado siete de sus últimos once partidos en la Liga Endesa. Los de Rafa Pueyo, que ya habló de la necesidad de contar con un balance positivo para estar en el torneo del KO, no dependen de sí mismos y, probablemente, con las europeas de Charleroi se agotó el cupo de carambolas de la temporada. Pero en el baloncesto ya nada es imposible y las cuentas aquí están claras.

El conjunto de Miribilla tiene el octavo puesto a una victoria de distancia, pero también a cuatro equipos por delante. El Bilbao Basket está obligado a ganar en Santiago para poner en marcha todas las cábalas posteriores, aunque saltará a la cancha del Fontes do Sar sabiendo si tiene o no opciones de estar en la cita de Málaga en función de lo que ocurra en los partidos del sábado. Si los hombres de negro vencen, tienen que perder los cuatro equipos que le preceden y, además, entrarán en juego los averages de cada uno.

El Gipuzkoa Basket, octavo con +55, es el que mejor lo tiene, aunque debe ganar en su visita del Estudiantes. El CAI Zaragoza (+14) juega en casa ante el UCAM Murcia, el Fiatc Joventut (+12) se medirá al Valencia Basket en la Fonteta y el Cajasol (-19) recibirá al Barcelona. Al margen de la derrota de todos sus rivales, el Bilbao Basket, que cuenta con un +8 en su balance de puntos, necesitaría una victoria muy amplia ante el Rio Natura Monbus y una derrota muy abultada de los donostiarras.

En cualquier caso, un triunfo ante los gallegos permitiría al Bilbao Basket mantenerse en la pelea por los puestos de play-off antes de abordar una segunda vuelta con un calendario bastante favorable en casa. Desde el Barcelona, tercer clasificado, diez equipos están separados por solo cuatro partidos por lo que, al margen de quienes se cuelen en la Copa, las posiciones pueden variar mucho en la segunda mitad de la temporada.

En sus circunstancias actuales, el equipo bilbaino necesita alicientes competitivos y esos los puede encontrar en la Liga y en la Eurocup. Nadie desprecia la Copa ni la borra de sus planes, pero tampoco es un torneo que se le haya dado especialmente bien al Bilbao Basket. Tener unos días libres para oxigenar la cabeza y las piernas no vendrá nada mal a una plantilla que ya va muy exigida y que necesitará toda su energía para afrontar los otros dos objetivos, que son pasar el Last 32 de la Eurocup y acabar la Liga entre los ocho primeros. Con eso la temporada se daría por perfectamente cubierta.