bilbao. Rudy Fernández ha elegido el Real Madrid para salvar el lockout, el cierre patronal de la NBA. Según informaba ayer Marca.com, el alero balear jugará a las órdenes de Pablo Laso hasta que tenga que incorporarse a los Dallas Mavericks. A partir de ahí, el desenlace de este culebrón está lejos de acabar con el jugador internacional vistiendo la camiseta blanca en la temporada 2012-2013, como se había asegurado.

Rudy Fernández y sus agentes han hecho lo lógico dadas las circunstancias: guardarse bazas para el futuro. El jugador quiere comprobar hasta dónde puede dar de sí en su primera campaña con los actuales campeones de la NBA y después, decidir. No descarta continuar en Dallas con un mejor contrato más allá de la próxima temporada si su rendimiento es alto, pero en ese caso debería indemnizar al Real Madrid, que era el punto de fricción para cerrar el acuerdo porque el club blanco no podía acometer una operación arriesgada en lo económico sin alguna contraprestación. Además, cuando Rudy regrese a Europa lo hará al Real Madrid.

El jugador malloquín se suma así a la escasa nómina de jugadores destacados de la NBA que recalarán en Europa hasta que se levante el cierre patronal. De momento, solo el acuerdo de Deron Williams con el Besiktas ha acercado a una estrella de aquel baloncesto a Europa. El base All Star de los New Jersey Nets volverá a la NBA en cuanto se reabra la competición, lo mismo que harán otros jugadores que han fichado por equipos de la Euroliga como el base de los Nuggets Ty Lawson, que se ha comprometido con el Zalgiris, o el pívot montenegrino de los Timberwolves Nikola Pekovic, que irá al Partizan.

No habrá muchos más porque no hay dinero en Europa para pagar a las grandes estrellas de la NBA, ni siquiera entre los clubes más poderosos de la Euroliga. Al contrario, ahora muchas miradas apuntan a China, donde sí pueden darse las condiciones para que alguno de estos jugadores maten el tiempo.