bilbao. Raúl López será el primer fichaje del Bizkaia Bilbao Basket para la próxima temporada. El nombre del base de Vic, otro de los juniors de oro de la generación de 1980, ha rondado como posible refuerzo del equipo bilbaino en los últimos años, aprovechando su relación profesional con Gorka Arrinda y José Cobelo. De hecho, el propio jugador ha estado en varias ocasiones en Bilbao por cuestiones personales y deportivas. Ahora, el reclamo de la Euroliga y la conclusión de su contrato de dos temporadas con el Khimki serán factores decisivos para que López vista la camiseta negra. También la presencia de Mumbrú y Hervelle, buenos amigos del catalán, supone una baza para acercar su contratación.

La llegada del base internacional, cuyas características complementarán perfectamente las de Aaron Jackson, no debe sorprender. Sí, en cambio, el momento elegido para que los contactos se hagan públicos, justo cuando el Bizkaia BB prepara el asalto a la final de la Liga ACB y Fotis Katsikaris ha querido aplazar cualquier análisis sobre la configuración de la plantilla para la próxima temporada ya que el nuevo escenario puede obligar a algún cambio de planes.

El fichaje de Raúl López cubriría el puesto de segundo base, lo que conllevaría que Josh Fisher no siguiera en Bilbao u ocupara la plaza de Paco Vázquez como undécimo jugador para los puestos de base y escolta. Lógicamente, la continuidad de Javi Rodríguez está descartada.

Raúl López se formó en el Joventut, como Mumbrú, y debutó en la Liga ACB con apenas 18 años. El oro en el Mundial junior de Lisboa en 1999 le propulsó como uno de los mejores bases jóvenes de Europa, algo que pronto confirmó en la ACB. Sergio Scariolo lo fichó para el Real Madrid lo fichó con 20 años antes de que empezara el calvario de lesiones que ha frenado la carrera del base catalán. Pese a ello, jugó durante dos cursos en la NBA con Utah Jazz, pero las limitaciones físicas le sacaron de una Liga en la que el mejor Raúl López habría podido triunfar.

El millonario proyecto del Akasvayu Girona supuso su regreso a la Liga ACB y tres temporadas más en el Real Madrid precedieron a su marcha al Khimki. Scariolo y un gran contrato convencieron a López de aceptar la oferta de los rusos para formar pareja con Carlos Cabezas. El malagueño no aguantó más de un año antes de firmar por el CAI Zaragoza, pero el catalán ha aguantado también este curso que el Khimki comenzó en la Euroliga donde promedió 6,8 puntos, 2,6 asistencias y 1,3 robos en los diez partidos de la primera fase. Hoy, su equipo disputa el quinto partido de la semifinal de Liga ante el Unics Kazan. Quizás sea el último con el amarillo del Khimki. Raúl López se convertirá en un hombre de negro, algo que se veía venir desde hace un par de temporadas.