En el undécimo día de confinamiento por al crisis del coronavirus, Ainhoa Tirapu (Iruñea, 4-IX-1984) cogió el relevo de Iñaki Williams y Yuri Berchiche para realizar una rueda de prensa telemática en la que respondió a distintas cuestiones lanzadas por periodistas y aficionados rojiblancos. La capitana del Athletic femenino, que reconoció llevar la obligada estancia en casa "bastante bien", en contrapunto a lo que inicialmente pensaba, se congratuló de que el fútbol femenino afronte una situación como la actual, con todas las competiciones deportivas paradas y con muchos clubes pensando firmemente en realizar un ERTE, con el convenio ya firmado. "Ahora estamos más protegidas", aseguró.

"Ahora me alegro de haber firmado el convenido, porque eso nos da unos recursos a las jugadoras que antes no teníamos. Al conseguir que la jornada laboral sea del 75%, si te metes en un ERTE la cotización se mantiene más alta de lo que había antes. Por eso me alegro. Ahora estamos más protegidas cuando vamos a un ERTE", explicó Tirapu. En este sentido, cuestionada acerca de si estaba satisfecha por haber alcanzado el acuerdo, se mostró contenta "por haber conseguido al menos una base a partir de la cual seguir creciendo". En un ejercicio de sinceridad, eso sí, admitió que "en una negociación para llegar a un acuerdo siempre tienes que ceder, nunca vas a conseguir el 100% de lo que solicitabas. Y así ha sido. Ha habido unas líneas rojas que marcamos de las que no queríamos bajar. La última fue la de la jornada, porque entendíamos que blindar la jornada nos daba muchos otros derechos".

Convenio al margen, la guardameta rojiblanca no ocultó que su deseo es que las competiciones se reanuden una vez acabe la cuarentena. Asumió, eso sí, que se vivirá una situación "difícil", pero reconoció que "hay muchas ilusiones puestas". "Yo quiero jugar la Copa. Lo teníamos muy cerca, estábamos en semifinales y somos muy competitivas. Si preguntas a una jugadora si daría por terminada una competición cuando todavía tiene posibilidades de conseguir algo, ninguna te va a decir que no quiere jugarla. Dependerá mucho de cómo se reanude. Si tienes que meter los siete partidos de liga que quedan, la Champions, la Copa€ Va a ser un calendario complicado, pero siempre vamos a querer competir", agregó.

En este sentido, admitió que es "factible" que se pueda jugar. "Quedan las semifinales y la final, pero todo dependerá de cómo evolucione la situación. Lo primero es lo primero. Si me preguntáis a mí, que se juegue cuando sea. Tenemos opciones de entrar en la final y ganar un torneo que no tenemos. La idea de apañar una semifinal y una final en poco tiempo la tengo", apuntó. Y es precisamente esa "incertidumbre" lo que reconoció que peor lleva del confinamiento.

En otro orden de cosas, explicó que se ha marcado una rutina diaria. "Me levanto a las nueve, hago un curso y a las doce entrenamos. Luego me subo a la bicicleta, cocino... Y por la tarde si hace bueno salgo al balcón a leer y si hace malo, pues leo dentro o veo una serie". Además, explicó que utiliza "una pelota de gomaespuma" que se compró cuando se rompió el dedo "para realizar ejercicios de fuerza". "Ahora juego prácticamente a pelota mano con ella contra las paredes de casa. Cuando pega en un canto y me la devuelve tengo que ejercitar los reflejos. Portería no puedo hacer", lamentó antes de asegurar que para ella "por la edad" se le va a hacer "dura la vuelta".

"Yo quiero jugar la Copa. Lo teníamos muy cerca, estábamos en semifinales y somos muy competitivas"

"En la negociación del convenio marcamos unas líneas rojas de las que no queríamos bajar"

Portera del Athletic