La salida de Óscar de Marcos dejará un vacío inestimable en el vestuario del Athletic en cuanto a veteranía se refiere. La figura de De Marcos, que el curso pasado tomó el relevo de Iker Muniain en la capitanía del equipo, ha trascendido de lo deportivo a lo largo de su carrera por ser portador de unos valores estimados más allá de las fronteras del club bilbaino. Ahora, estando próxima su salida, el legado recaerá en otros, que deberán de dar un paso al frente.
El brazalete pasará a manos de Iñaki Williams, que se ceñirá la ikurriña convertido en primer capitán cuando presente 31 años. Su rol, lógicamente, adquirirá mayor relevancia, no obstante lleva tiempo asumiendo en cierta medida ese papel, dando la cara, como el día que él y De Marcos recriminaron a la grada por el lanzamiento de bengalas en el Olímpico de Roma. En los últimos tiempos, las suplencias de De Marcos han dado lugar al relevo de eso peso específico que atesora un capitán.
Por edad, el papel jerárquico también alcanzará a otros jugadores, aunque algunos de ellos no han definido aún su futuro, lo que podría dejar aún más vacantes de cara a la siguiente temporada en relación a la veteranía. Son los casos de Yuri Berchiche, que a sus 35 años recién cumplidos tiene contrato en vigor hasta el próximo 30 de junio, o de Iñigo Lekue, que en mayo alcanza los 32 años y que podría estar ante el final de su trayectoria en el club ese mismo junio. En esta relación también cabe citar a Mikel Vesga, que en abril tocará a los 32 años, pero en su caso el vínculo con la entidad se prolongará hasta junio de 2027.
Por edad también forma parte de este grupo Iñigo Ruiz de Galarreta, que en agosto cumplirá 32, aunque antes deberá resolver su futuro, dado que su contrato también concluye el próximo 30 de junio. Y el siguiente en esta relación de veteranos es Yeray Álvarez, que a sus 30 años correrá puestos en la clasificación de la veteranía en el vestuario; pasará a ser el quinto de mayor edad en la plantilla. En ellos recaerá el peso de la experiencia, de la transmisión de unos valores que han hecho que la figura de De Marcos resulte fundamental. Serán, todos o algunos de ellos, quienes deberán imbuir a las nuevas generaciones de unos valores que De Marcos ha sabido portar con honores.