L Athletic, señalado tras la nefasta imagen que ofreció en su merecida derrota ante el Celta en San Mamés, visita mañana jueves a un Cádiz cargado de moral y confianza después de asaltar el lunes el Camp Nou con su segunda unidad en liza. Quiso aprovechar Sergio González la visita al Barcelona, adversa a priori al tratarse de un estadio en el que los andaluces nunca habían ganado, para dar minutos a una amplia mayoría de suplentes habituales con la vista puesta en el choque de este jueves contra los de Marcelino García Toral y el plan no le pudo salir mejor al técnico catalán. Además de dar un respiro a siete titulares, el entrenador del conjunto gaditano consiguió sumar los tres puntos en juego gracias a un solitario gol de Lucas Pérez y a una exhibición bajo los palos del argentino Jeremías Ledesma.
Hasta seis paradas, a cada cual de ellas más meritoria, firmó un guardameta que sostuvo cuando hizo falta a un equipo que completó un sobresaliente partido en todas las líneas del campo y que poco tiene que ver con el Cádiz que comandó desde la banda Álvaro Cervera hasta su destitución el pasado 11 de enero. El entrenador nacido en Guinea Ecuatorial, que ejerció como guía y líder en un club al que llegó en la primavera de 2016 para subirlo desde Segunda División B hasta Primera División, fue cesado cuando los andaluces, después de enlazar siete jornadas sin vencer, eran penúltimos en la clasificación con catorce puntos a cuatro de la salvación. Tres meses después y tras su histórico triunfo en el Camp Nou, el Cádiz sonríe momentáneamente al figurar con dos puntos de margen respecto a la zona roja de la tabla.
El lavado de imagen, más allá incluso de los resultados, ha sido notable desde la llegada al banquillo de Sergio González, quien ha apostado por dotar de una mayor presencia en campo rival a un entregado grupo de futbolistas que no solo defiende con orden y acierto. También ataca y con una suma importante de jugadores bajo el inamovible sistema 1-4-4-2 que está dando sus frutos en fondo y forma al técnico catalán, capaz de armar en tiempo récord un solvente Cádiz sin miedo a desplegarse y a acumular hombres por delante del balón pese a su delicada situación clasificatoria. Liberados de ataduras que otrora llegaron a resultar la clave del éxito para el colectivo, no en vano, parecen encontrarse unos futbolistas que encaran el encuentro contra el Athletic con la moral por las nubes y con el apoyo de una afición que convertirá mañana el Nuevo Mirandilla en una auténtica olla a presión.
El objetivo de revalidar la permanencia lograda la pasada temporada en su regreso a la élite, sin ir más lejos, vuelve a figurar al alcance de la mano para un Cádiz que tiene en la figura del veterano Álvaro Negredo a su máximo goleador esta temporada. Autor de seis tantos y una asistencia en los 28 partidos de liga disputados, el ariete madrileño vive una especie de segunda juventud con Sergio González, quien le ha devuelto la etiqueta de intocable dentro de una plantilla en la que asoma como el principal encargado de perforar las redes rivales junto con el hondureño Choco Lozano, el aliado en la delantera que le sigue en el ranking de máximos artilleros del cuadro gaditano gracias a sus cinco dianas.
Con un gol desde su llegada en el mercado invernal, asimismo, figura un relanzado Lucas Pérez que vio portería en el Camp Nou y que apunta a repetir titularidad mañana en un equipo que suma una única derrota en las cuatro últimas jornadas de liga.
los antecedentes
En cuanto a las visitas del Athletic al Nuevo Mirandilla, cabe destacar que los gaditanos se han impuesto en seis de los trece partidos que han jugado como locales ante los rojiblancos, repartiéndose los otros siete encuentros en tres empates y cuatro triunfos para los leones. El resultado más amplio conseguido por el Cádiz a costa de los bilbainos fue en la temporada 1981-82 con el serbio Dragoljub Milosevic en el banquillo de los cadistas, que ganaron por 3-0 con dos goles del centrocampista gaditano Pepe Mejías y otro del delantero Rafael Choquet.
El 0-4 registrado el pasado curso, por otro lado, figura como la victoria más holgada de los rojiblancos en el antiguo Ramón de Carranza. La goleada, el triunfo más abultado conseguido a domicilio desde la llegada de Marcelino García Toral a Bilbao, se produjo gracias a un doblete de Alex Berenguer y sendos goles de Iñaki Williams y Unai López.
Los gaditanos, dos puntos por encima del descenso, solo han sufrido una derrota en las cuatro últimas jornadas
