Cuando hace un par de semanas se dieron a conocer los dorsales de los futbolistas del Athletic, llamó poderosamente la atención la elección del 20, un número ligado a la figura de Aritz Aduriz desde el regreso de este al conjunto bilbaino en el verano de 2013. Ocho años imborrables para el aficionado rojiblanco que tendrán continuidad en la figura de Asier Villalibre. El delantero de Gernika dejó atrás el dorsal 25, el que lució el curso pasado, en su primera temporada completa como miembro de pleno derecho de la primera plantilla del Athletic, y apostó por el 20, con todo lo que ello implica. Ayer, en una rueda de prensa telemática, el atacante explicó los motivos del cambio: "Tenía el 25, estaba contento con ello e iba a decidir seguir con él, pero como tenemos tres porteros y el dorsal 25 es para uno de los porteros, tuve que cambiar. Quedaban el 20, el 19 y el 2. Pensé que podía ser mucho peso, pero al final en lo único que pensé fue en ese niño o esa niña de la calle que se pone el 20 por Aritz. Y lo pienso igual. El 20 y Villalibre. Es una gran ilusión y un gran honor para mí".

Autor de cinco goles entre liga (3) y Copa (2) la pasada campaña, en la que participó en 23 partidos y disputó 727 minutos, lo que se traduce en que marcó un tanto cada 145 minutos, Villalibre admitió que se toma "bien" las palabras del entrenador Gaizka Garitano en las que aseguró que a su equipo le falta gol. "Sé que no estamos pasando por una racha goleadora y al final lo que necesitamos para ganar los partidos son goles. El míster lo que quiere es eso, que tengamos competencia arriba, que intentemos entrenador duro, que intentemos mejorar en lo del gol y que tengamos resultados en el campo".

En este aspecto, agregó que "en el equipo hay muchos delanteros de mucho nivel. La competencia es brutal" y recalcó que no hay "falta de gol". "Es verdad que igual últimamente no hemos tenido esa efectividad, pero eso no significa que haya falta de gol. En el equipo hay grandes jugadores con mucho gol y trabajamos día a día para dar resultados en el campo".

En lo que respecta a su situación en el equipo, en el que salvo sorpresa parte como suplente, el delantero de Gernika aseguró que está "con confianza". "Intento entrenar bien, como siempre. El objetivo es mejorar cada día y yo estoy disponible para jugar. Luego es el técnico el que decide". A una semana de cumplir los 23 años, Villalibre, que no sabría concretar qué le falta o deja de faltarle, asume con total naturalidad que tiene que seguir "mejorando". "Tengo 22 para 23 y me quedan muchos años. Se mejora todos los años, se intenta aprender todos los años y eso es lo que me hace falta, seguir mejorando y practicando día a día".

Parece totalmente recuperado. Yeray Álvarez, quien el lunes se ejercitó al margen de sus compañeros en Lezama en una sesión en la que además de recibir tratamiento de fisioterapia realizó carrera continua sobre uno de los campos, completó ayer la sesión matinal con el grupo. Así, todo hace indicar que está ya plenamente recuperado de las molestias musculares que sufrió en el primero de los dos partidos amistosos del pasado viernes frente al Sevilla y que podrá ser de la partida en el derbi ante el Eibar que debería jugarse pasado mañana pero que todo hace indicar que se disputará el sábado o el domingo.

Yeray ya trabaja con el grupo

"Pensé en ese niño o esa niña de la calle que se pone el 20 por Aritz. Es una gran ilusión"

Jugador del Athletic