Bilbao - El Martínez Valero, el Santiago Bernabéu, el Sánchez Pizjuán y Las Llanas. Cuatro estadios de diferente abolengo y que tienen en común haber recibido al Athletic en el último mes. Cuatro partidos en los que el colectivo de Gaizka Garitano no ha conocido la derrota, lo que ofrece su acento meritorio, sobre todo en los casos de sus visitas consecutivas al Real Madrid y al Sevilla, saldadas ambas con sendos empates, en tanto que cumplió en sus primeros trámites en Copa frente al Intercity alicantino y el Sestao River, respectivamente. El conjunto rojiblanco retoma el próximo domingo el pulso de la liga después del atípico último fin de semana copero y lo hace ante el Celta, situado en el alambre de la zona de descenso. Supondrá el regreso del Athletic a San Mamés pasado un mes de su anterior comparecencia, por lo que el mono en Bilbao es evidente a causa de tan larga espera.

La primera plantilla retorna esta mañana a los entrenamientos en las instalaciones de Lezama después de gozar de dos jornadas de asueto y se reagrupa con todos los sentidos dirigidos al partido frente al conjunto celtiña, cuarto clasificado por la cola y ante el que deberá cambiar de chip una vez consumada la fiesta del fútbol vizcaino en Las Llanas. El Athletic no compite en La Catedral desde el 14 de diciembre, cuando no fue capaz de pasar del empate sin goles en el derbi frente al Eibar de José Luis Mendilibar, por lo que emerge la ansiedad en la masa social athleticzale, convencida de la importancia de arrancar con buen pie la segunda vuelta. No en vano, San Mamés se ha convertido en un fortín para el equipo de Garitano, que ha sumado en su guarida 20 de los 29 puntos que ostenta en el ecuador de LaLiga Santander.

Los números del Athletic en su campo son espectaculares y ofrecen matices históricos. En los nueve partidos de liga que ha disputado ante su parroquia, el conjunto rojiblanco solo ha perdido una vez, frente al Valencia en la séptima jornada (0-1), mientras que ha vencido en seis ocasiones -Barcelona (1-0), Real Sociedad (2-0), Alavés (2-0), Espanyol (3-0), Levante (2-1) y Granada (2-0)-; un recorrido que se cierra con las tablas firmadas ante el Valladolid (1-1) y Eibar (1-1). Con estos datos en la mano, el Athletic presume de un enorme poderío como anfitrión, hasta el hecho de que solo ha encajado tres goles en esos 810 minutos, defendidos todos ellos por Unai Simón, que paradójicamente se podría perder el compromiso con el Celta debido a las paperas que padece desde días atrás. Se podría desvelar más información sobre el estado del portero con la vuelta al trabajo de los leones.

un visitante amable El Athletic abre la segunda vuelta con el Celta, curiosamente el equipo que se encargó de inaugurar el nuevo San Mamés junto a los rojiblancos el 16 de septiembre de 2013. Los dirigidos entonces por Ernesto Valverde se impusieron por 3-2 en un encuentro vibrante. El Celta es el conjunto que más ocasiones ha visitado el actual recinto bilbaino, un total de ocho, dos de ellas dentro de la Copa; y solo ha sido capaz de vencer en el duelo del torneo del K.O. en el curso 2014-15 por 0-2, aunque no fue suficiente para que los vigueses pasaran de ronda. En sus últimas seis comparecencias en liga en La Catedral el equipo gallego se ha tenido que conformar con dos empates después de sufrir cuatro derrotas.

San Mamés asomará de nuevo como determinante en el devenir del colectivo de Gaizka Garitano, de ahí el impacto que proyecta jugar en Bilbao. El Athletic se adentra en un mes agotador en función de su recorrido en la Copa (hoy conocerá a su rival en los dieciseisavos de final), competición en la que tiene depositada fundadas expectativas de conseguir algo importante. Los leones, al margen del torneo del K.O. con el que se reencuentran la próxima semana, afrontan en menos de treinta días cinco jornadas de liga, tres de las cuales los disputarán en La Catedral, con el valor añadido que se entiende ofrece. Tras el Celta, deben pasar por el campo bilbaino el Getafe, rival directo a día de hoy en la lucha por los puestos europeos, y Osasuna, un contrincante incómodo como visitante. En medio, el Athletic visitará al Espanyol, actual colista, y a la Real Sociedad, en un derbi que se presenta apasionante.