Bilbao - La visita de este sábado al Wanda Metropolitano volverá a tener un aroma especial para Raúl García, otrora uno de los capitanes de un Atlético en el que consiguió dejar una imborrable huella a base de pundonor, goles y sacrificio con la consecución añadida de seis títulos. El navarro, que regresará al lugar en el que fue homenajeado en noviembre del pasado año al recibir su placa como leyenda del conjunto colchonero, con el que disputó 329 partidos a lo largo de ocho temporadas antes de recalar en el Athletic en el verano de 2015, confesó en la matinal de ayer que “hace mucho tiempo que me fui también de Osasuna y siempre tengo la sensación de jugar en una de las que han sido mi casa”.

“Evidentemente, me gusta poder ir allí -por el Wanda- e intentar hacer un buen partido para sacarlo adelante. Los recuerdos siempre están, sobre todo, cuando han sido positivos como lo fueron en sitios especiales como son Pamplona y allí, pero lo que más quiero es ganar para poder estar contento después del partido”, advirtió el propio Raúl García, autor de un gol en sus siete partidos como león ante el Atlético, en los que suma cinco derrotas, un empate y una única victoria, la cual tuvo lugar el pasado 16 de marzo en San Mamés (2-0) en el último enfrentamiento liguero entre ambos equipos. El único tanto del navarro como rojiblanco al cuadro madrileño, asimismo, se registró en la quinta jornada de la campaña 2017-18, cuando el de Zizur Mayor consiguió batir sobre la bocina a Jan Oblak sin que su gol sirviera para evitar la derrota por 1-2.

El sábado, así las cosas, Raúl García buscará su primer triunfo con el Athletic en el feudo colchonero tras morder el polvo en sus tres visitas previas como león, si bien logró vencer como visitante al cuadro madrileño cuando militaba en Osasuna en el ejercicio 2005-06. Un tanto del exorjiblanco Iñaki Muñoz dio entonces los tres puntos a los rojillos en un encuentro en el que el Raúl García saltó al terreno de juego en el minuto 81. - A. Aramendia