Bilbao - Gaizka Garitano, a quien se pudo observar sumamente contrariado en la banda del José Zorrilla, no negó que el Valladolid salió ayer al campo “mucho más enchufado que nosotros” y que, por tanto, “nos desbordaron al principio”. La primera mitad completada por sus pupilos en Pucela, no en vano, no dejó nada satisfecho al técnico rojiblanco, quien reconoció que “no podemos estar contentos con los primeros 45 minutos. A pesar del tono crítico empleado tras la derrota, el entrenador derioztarra quiso salir en defensa de sus futbolistas al remarcar que “si este equipo tiene algo es carácter y punch”. “El segundo tiempo, además, ha sido nuestro y hemos generado ocasiones para empatar, pero el balón no ha querido entrar”, destacó asimismo el derioztarra, quien agregó en relación al desenlace del encuentro que el equipo dirigido por Sergio González tuvo finalmente “esa suerte que le ha faltado en otros partidos”.

En cuanto al juego desplegado por sus hombres, Garitano, que apostó de inicio por Mikel San José y Dani García como pareja de mediocentros ante la baja por lesión de Beñat Etxebarria, hizo referencia una vez más a que “con el balón sufrimos mucho, porque perdemos muchos balones y eso hace que tengas que defender perfecto”. “Para poder entrar en Europa tienes que estar ahí hasta el final y nadie dijo que iba a ser fácil”, advirtió acto seguido Garitano, quien señaló de cara a las dos últimas jornadas de liga que “llegamos bien, somos de los mejores equipos en las últimas jornadas, en las que tenemos números de Champions y seguimos siendo optimistas, porque dependemos de nosotros mismos”. “

“Nos hubiera gustado ganar este partido, pero no ha podido ser e intentaremos ganar el próximo”, resaltó el técnico vizcaino, que explicó el motivo por el cual decidió dejar en el banquillo de inicio a Raúl García. El navarro, que comenzó a realizar ejercicios de calentamiento en la primera mitad ante el bajo rendimiento colectivo, saltó al césped tras el descanso, dado que de entrada “queríamos enganchar un poco más de fútbol en la media punta con Iker, porque fuera de casa nos estaba faltando un poco de fútbol y ya teníamos gente fuerte en el campo”, según afirmó Garitano.

EL ESTADO DE IÑIGO MARTÍNEZ La otra novedad en el once inicial respecto al derbi ante el Alavés estuvo en el centro de la defensa, donde Unai Núñez ocupó el lugar de Iñigo Martínez, quien se probó antes del partido y vio el encuentro sentado en el banquillo al tener “una infección en el hueso y no poder pegarle al balón”. “Se probó el sábado, pero no se veía bien”, desveló el entrenador rojiblanco acerca del estado físico que presenta el 4 del Athletic, quien intentará estar a disposición de Garitano de cara al partido del domingo contra el Celta en San Mamés, donde los leones, sin margen de error, tratarán de olvidar la derrota de ayer y sumar los tres puntos en juego en una ardua travesía hacia Europa con nuevos equipos inmersos en de lleno en la pelea.