Garitano se compromete hasta junio de 2020
En un contexto muy favorable a sus intereses, el míster ha preferido que el acuerdo a firmar en breve sea por una única temporada. Su actual contrato ya fue revisado por la directiva
bilbao - El Athletic y Gaizka Garitano han hablado y están de acuerdo en prolongar su vinculación por espacio de una temporada más. La iniciativa de adquirir un compromiso para un año corresponde al técnico y ese es el plazo acordado en los contactos mantenidos hace ya algunos días. La continuidad del entrenador se hará pública en breve, pero hasta ayer al menos no se había fijado una fecha concreta para oficializar una noticia que tenía todos los visos de materializarse, entre otras cuestiones, porque era el objetivo que se había marcado la entidad, según ha reconocido explícitamente Rafa Alkorta en repetidas declaraciones y deslizado Aitor Elizegi.
El máximo responsable del área deportiva del club no ha tenido reparos en manifestar su satisfacción por el trabajo desplegado por Garitano junto a Patxi Ferreira y el resto de su equipo desde que se hicieran cargo de la primera plantilla. Tanto Alkorta como el presidente les han agradecido públicamente los servicios prestados hasta la fecha. Flores al margen, Alkorta no se anduvo por las ramas y se posicionó en cuanto aterrizó en Lezama. Expresó su intención de sentarse con el técnico más pronto que tarde a fin de extenderle una propuesta, cosa que sucedió recientemente. Garitano respondió afirmativamente y transmitió que quería firmar únicamente hasta junio de 2020.
Las razones de Garitano para plasmar en el documento pertinente esa duración concreta del contrato se desconocen de momento, pero el club no ha puesto pega alguna. Visto el contexto en que se ha planteado la negociación, cabe suponer que el técnico hubiera tenido la opción de asegurarse por escrito su estancia al frente del Athletic a más largo plazo de haberlo pretendido. Sabe que cuenta con el apoyo incondicional de la directiva y los responsables del área deportiva, prueba de ello es que ya se había procedido a la revisión y consiguiente mejora del contrato con el que accedió a su actual responsabilidad procedente de Bilbao Athletic antes de navidades.
Garitano fue contratado en julio de 2017 para hacerse cargo del filial y sustituir en dicha tarea a José Ángel Ziganda, que acababa de tomar las riendas del Athletic en sustitución de Ernesto Valverde, quien ese verano puso punto final a una etapa de cuatro años e hizo las maletas con destino al Barcelona. Garitano cumplió un curso entero en su cometido con los cachorros y el pasado diciembre, Josu Urrutia tomó la determinación de ofrecerle la dirección del primer equipo. El deficiente balance de Eduardo Berizzo al cabo de catorce encuentros de liga precipitó el relevo.
la alternativa Más allá de que ocupaba plaza de descenso, a tres puntos de la frontera de la permanencia, el Athletic transmitía entonces síntomas inquietantes, sufría lo indecible especialmente en la faceta defensiva. Urrutia había barajado la destitución de Berizzo semanas antes, pero quiso apurar pensando en que se produciría una reacción, una posibilidad alentada constantemente por los futbolistas, encantados con el trato y la metodología del técnico argentino. El 3 de diciembre, el Athletic sufrió su enésimo revés (3-0) en el campo del Levante y Urrutia, que presenció la derrota en directo, ya no esperó más. Unas horas después se procedía al cambio y Garitano debutaba en El Alcoraz, en cita copera. El fin de semana siguiente, se estrenó en San Mamés con una victoria por la mínima sobre el Girona.
El triunfo, muy corto para los méritos contraídos, supuso el arranque de una fulgurante escalada en la clasificación. Quince puntos sobre veintiuno, sin mediar derrota y recibiendo únicamente tres goles, sirvieron para poner tierra de por medio y asomar en la undécima posición de la tabla. A pesar de que luego llegaron dos derrotas -Anoeta y Mestalla-, el Athletic no ha dejado de competir y, tras despachar al Atlético de Madrid el pasado sábado, posee 37 puntos, cifra que legitima la certeza de que el principal objetivo marcado con la elección de Garitano está amarrado. Y con una antelación impensable que da pie a afrontar el tramo final del calendario con tranquilidad. Fue antes de la celebración del duelo con los colchoneros cuando Alkorta y Garitano consensuaron los términos del acuerdo.