bilbao - Se trata de seguir sacando rédito a la buena ola a la que se ha subido el Athletic. Son tiempos de hacer caja. El conjunto rojiblanco lo sabe. Asume que es su momento. Los ha tenido muy malos al inicio de curso y ahora le toca disfrutar de una inercia positiva en la que se ha metido desde la debacle en el Santiago Bernabéu. Son cinco jornadas consecutivas sin hincar la rodilla, con una cosecha de once puntos sobre quince posibles, y esta tarde quiere engordar sus cifras a costa de un Getafe irregular y en un estadio en el que el curso pasado acabó con su leyenda negra, gracias al triunfo fraguado con el solitario tanto de Aymeric Laporte, que volverá al once tras su descanso el pasado martes en Ucrania.

El Athletic, precisamente, debe cambiar de chip. La victoria en Lviv frente al Shakthar Donetsk supuso todo un subidón en el colectivo, pese a que los tres puntos, tardíos, no evitan el adiós a la Champions, aunque acerca el segundo objetivo, engancharse a la Europa League. El propio Ernesto Valverde lo avisó en su comparecencia de ayer: “Ahora hay que bajar al verde y ponerse las pilas”. Toca la Liga, la que le da de comer. Y en la que los leones deben definir cuál es el camino a tomar, especialmente porque la zona europea ya no está tan lejos. “El séptimo nos lleva 5 puntos y le sacamos 5 puntos al 19, parece que el séptimo puesto se podría estar en Europa el año que viene, el partido de Getafe puede marcar esa tendencia y puede ser determinante en este aspecto”, ilustró el técnico.

Se trata también de un partido trampa. El Athletic es consciente de su línea ascendente, pero esta puede desembocar en una especie de desenfoque del encuentro, donde le espera un Getafe necesitado que tirará de una guerra de guerrillas en el césped. Valverde, en este sentido, no se fía del cuadro azulón, del que dice que es “peligroso con espacios”, para acentuar el papel de Pablo Sarabia y los interiores Yoda e Hinetroza, los jugadores que más le preocupan: “Están en un buen momento de juego, se les ve que tiene ambición y fuera de casa quizás dan más rendimiento. Tienen problemas con el gol, pero salvo Madrid y Barcelona ¿quién no tiene problemas con el gol?”, además de incidir en las características del estadio y del habitual ambiente gélido, que “te obliga a jugar aún más concentrado”.

fiel a sí mismo El técnico rojiblanco deberá hacer retoques en defensa por la ausencia de Xabi Etxeita, lesionado en Ucrania, aunque Valverde no se lamenta, ya que “tenemos la zaga bien cubierta, como también el año pasado”, en referencia a Gurpegi, San José y Laporte, que volverá al once y probablemente también lo haga Iraola, al mismo tiempo que elogió la irrupción de Borja Viguera, que acumula tres titularidades consecutivas, en las que ha jugado en todas las posiciones ofensivas, matiz al que resta importancia el Txingurri, que adelantó que efectuará algún cambio respecto a lo que puso en escena en Ucrania: “Lo de las posiciones de Borja es muy relativo. Con que juegue por ahí arriba y tenga relación con el gol, me vale. Está entrando y haciendo cosas”.

El Athletic, a la espera de “jugar de manera redonda” como desea el técnico, se verá las caras frente a un Getafe inmerso en una dinámica distinta a la de los leones, ya que no le acompañan los últimos resultados. Sin embargo, el conjunto de Cosmin Contra cuenta con recursos suficientes como para dar más de un disgusto a sus rivales, sobre todo con el regreso de Pedro León, que ha recuperado su ficha federativa. Un equipo azulón que apostará por imprimir un juego alegre, apoyado en un centro del campo como altas dosis de calidad, pero al que le penaliza su escasa pegada.