bilbao. El destino es así de caprichoso. Por lo menos en el fútbol. Ricardo Sa Pinto, técnico del Sporting de Portugal, y el Athletic se reencuentran hoy después de doce años sin tener contacto. Sa Pinto (Oporto, 10 de octubre de 1972) "es una persona visceral". Así lo califica Roberto López Ufarte, exjugador y extécnico de la Real Sociedad. Sergio Corino, también exjugador de la Real y del Athletic, dice del portugués que "es una persona con una personalidad muy fuerte". Tanto López Ufarte como Corino tuvieron una relación muy cercana con el hoy entrenador sportinguista, que ejerció como futbolista de la Real Sociedad entre 1997 y 2000.
Sa Pinto recaló en Donostia en una etapa muy oscura en su carrera como jugador. Entonces, se encontraba inhabilitado por agredir a Artur Jorge, seleccionador portugués. Protagonizó un episodio que le marcó. "Realmente se excitaba. Si algo no le gustaba, saltaba. Su carácter le acarreaba problemas", describe López Ufarte, en aquellos años segundo entrenador de la Real: "Me llevaba bien con él y todavía mantenemos contactos. Sé que le marqué en la Real. Estuve muy cerca de él. Estuvo un año sancionado (por su agresión a Artur Jorge) y quise colaborar para recuperarle. Estuvo más tranquilo en Donostia y lo cierto es que hacía cosas increíbles en los entrenamientos. Quizá no supo aprovechar algunos momentos, ya que no dio el nivel que se esperaba de un jugador de su calidad".
Entrenamientos en los que llegó a verse con Sergio Corino, que también presumía de carácter. "Tenía mucha personalidad, pero era un buen tío, muy abierto. Tenía fama de jugador polémico, pero era cercano en el trato. Yo siempre iba a cuchillo no solo en los partidos, sino también en los entrenamientos, y si le hacía una entrada algo dura, no se mosqueaba. Me decía: relájate, que juego en tu equipo".
Corino (Bilbao, 10 de octubre de 1974) rememora una anécdota peculiar con Sa Pinto, con el que compartió vestuario en la campaña 1999-2000. El exjugador de la Real y del Athletic, que se recupera de la intervención de cadera a la que fue sometido hace un mes, apunta que el entrenador del Sporting era "un poco coqueto, sobre todo a la hora de cuidar su melena, que se la retocaba hasta en los partidos, en los que jugaba con una especie de diadema. Se nos ocurrió la brillante idea de reunir dinero entre la plantilla, cuadro técnico, utilleros... para intentar cortarle el pelo. El bote se acercó a las 100.000 pesetas de entonces. Me respondió que no se cortaba el pelo por nada del mundo, ni por dinero. ¡Pero cuando le ofrecí las 100.000 pesetas! Eso sí, el dinero se lo di por adelantado. Logré raparle al cero, con una raya en medio de la cabeza", desgrana.
Corino subraya que el Athletic se encontrará hoy con un rival "que es el alma de su entrenador, o sea, con carácter, duro y muy competitivo". Lectura que comparte López Ufarte, que dice que el Sporting "es fiel al espíritu de Ricardo", si bien pone un matiz: "A mí me gusta más el estilo del Athletic, al que veo un punto por encima".