La Comisión Europea (CE) afirmó ayer miércoles que percibe una "dinámica positiva" en las reuniones que ha auspiciado para intentar resolver la disputa pesquera entre Francia y el Reino Unido por los problemas que está causando la aplicación de los acuerdos del Brexit en este sector y unas licencias para faenar que el Gobierno británico inicialmente se negaba a conceder a los pescadores galos. Un portavoz comunitario informó de las reuniones de los últimos días entre las autoridades británicas, francesas y de la Comisión, así como de la isla británica de Jersey (la más grande del canal de la Mancha) y subrayó que las negociaciones han impulsado la búsqueda de una solución para esta disputa.

"Las conversaciones nos han permitido trazar el camino a seguir en varios aspectos y creado una dinámica positiva", subrayó el portavoz Tim McPhie en la rueda de prensa diaria de la Comisión. Sus palabras coinciden con las del secretario de Estado de Transportes francés, Jean-Baptiste Djebbari, que ayer calificó de "constructivo" el ambiente de la negociación con su contraparte británica por las licencias que reclaman los pescadores franceses.

Estas reuniones, abundó McPhie, han permitido a ambas partes tener "un mejor entendimiento de los asuntos pendientes que habían impedido un progreso más rápido". "Esperamos que este compromiso positivo de todas las partes se traduzca pronto en un resultado positivo", añadió el portavoz, que explicó que a las próximas negociaciones técnicas se unirán también las autoridades de otra isla británica en las aguas controvertidas, Guernsey.

Francia había amenazado la semana pasada con aplicar desde el martes 2 de noviembre una serie de medidas de represalia porque reprocha al Reino Unido el bloqueo de una serie de licencias de pesca a las que considera que tiene derecho en virtud del acuerdo sobre el Brexit entre Londres y la Comisión Europea.

Sin embargo, después de entrevistarse en Glasgow con el primer ministro británico, Boris Johnson, el presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el pasado lunes a última hora que daba más tiempo a la negociación y que no se aplicarían desde el día 2 las represalias.

El secretario de Estado de Transportes francés destacó ayer que el lunes los británicos otorgaron 49 licencias adicionales y que "hay una negociación hasta el jueves".

Aunque los británicos afirman que han dado su visto bueno al 98 % de las demandas europeas, los franceses ponen el acento en que en torno a la mitad de las de sus pescadores han sido rechazadas y que ha habido un trato diferencial.

Otro encuentro

De hecho, la Comisión Europea participará mañana en una nueva reunión de negociación en el conflicto sobre las licencias de pesca entre Francia y el Reino Unido, en lo que parece una victoria de París para salir del marco puramente bilateral de las discusiones.

El portavoz del Gobierno francés, Gabriel Attal, anunció ayer esa nueva reunión, que está programada un día después del encuentro en París entre el ministro británico para Asuntos Europeos, David Frost, y su homólogo francés, Clément Beaune.

En una conferencia de prensa al término del Consejo de Ministros, Attal hizo hincapié en que el contencioso "es una cuestión europea" y por eso consideró "muy importante" la presencia del Ejecutivo comunitario en la convocatoria del viernes.

Horas antes, el secretario de Estado francés de Transportes, Jean-Baptiste Djebbari, había justificado que hasta ahora la negociación se haya llevado a cabo en un marco bilateral porque los franceses son "los más afectados" por el rechazo de Londres a conceder licencias a algunos pesqueros europeos para faenar en sus aguas jurisdiccionales. Attal quiso dejar claro que las medidas de represalia contra el Reino Unido están "suspendidas" pero siguen "encima de la mesa" y Francia está dispuesta a aplicarlas "si no conseguimos un acuerdo".