Bilbao - El Ministerio Fiscal y las acusaciones particular y popular mantuvieron ayer sus respectivas peticiones de prisión permanente revisable para la mujer acusada de asesinar a su hija de 9 años en su vivienda de Atxuri el pasado enero. Por su parte, la defensa de la acusada sostiene la inocencia de su patrocinada y confirmó su petición de libre absolución. A pesar de ello, introdujo la atenuante de confesión y colaboración con la justicia de la imputada, en el caso de que el jurado llegue a un veredicto de culpabilidad, lo que conllevaría, si es aceptada, la reducción de la pena y que eluda la prisión permanente revisable.

La acusada en su turno de palabra antes de que la magistrada presidenta del juicio con jurado diese por concluida la vista, insistió en lo que mantuvo desde el principio: "Que en casa entró ese hombre y lo sigo diciendo". Entre sollozos afirmó que "yo no tengo por qué matar a una hijita; no me entra en la cabeza matar a un hijo, no le entra en la cabeza a nadie. Yo amaba a mi hija, a ambas hijas, a la mayor también", subrayó. La sospechosa indicó que "yo solo quiero que se le encuentre", en referencia al encapuchado que entró en su casa y, según su versión, le obligó a matar a su hija y a escribir la carta autoinculpatoria, y denunció, al igual que su abogada, que "no se ha investigado lo suficiente", en relación al novio de su hija mayor, de 20 años, a quien durante el juicio señaló como el hombre que la obligó a matar a su hija. "No me parece normal que la policía haya creído lo que él dice y no haya investigado más", concluyó.

Los miembros del jurado popular recibirán hoy las instrucciones de la magistrada presidenta del juicio y el cuestionario que deberán rellenar para determinar el veredicto que emitan sobre el caso.

sin alteraciones psicopatológicas La mujer acusada, tal y como indicó ayer la perito forense, no padece alteraciones psicopatológicas ni está fuera de la realidad, por lo que "no hay causas que modifiquen o atenúen su imputabilidad". Tal y como añadió, únicamente le fue detectado un "abuso" de medicamentos opiáceos para intentar aliviar el dolor crónico causado por una hernia discal, pero sin "síntomas de descompensación psicológica, ni cambios psicoperceptivos ni reducción de la capacidad de comprensión sobre los hechos". Según relató la perito, en la entrevista que mantuvo con la acusada en mayo no percibió "signos de depresión" y la propia mujer negó que sufriera "brotes psicóticos",

La forense precisó que pese a que la acusada no lo reconoció, esta padecía "situaciones adversas" en su vida en el momento de los hechos, ya que el padre de la niña se disponía a reclamar su paternidad y los servicios sociales se habían puesto en contacto con ella debido al absentismo escolar de la pequeña. - Efe