Los pellets vertidos en la costa gallega parecen no llegar por el momento a las costas vascas. Sin embargo, “esta esquina del Golfo de Bizkaia favorece la retención de basura marina”. Así lo asegura la experta en tecnologías marinas de Azti, Irene Ruiz. 

El centro científico y tecnológico tiene sin embargo sistemas para monitorearlo y recogerlo. Ejemplo de ello son las redes puestas a disposición de dos barcos que se encargarán la próxima semana de analizar si los pellets llegan desde la costa gallega, y en caso de encontrarlos y que “haya una gran cantidad, recogerlos”, explica Ruiz.

Así las cosas, de momento no se prevé que la marea blanca alcance la costa vasca. Como explica la experta de Azti, “tenemos una situación que no es la típica, y este periodo de tiempo raro hace que lo que sería normal, que los pellets se dirigiesen hacia nuestras costas, no ocurra de momento”. 

Esta labor no es nueva para Azti, que lleva años trabajando con las basuras marinas. Como explica Ruiz, una de las líneas de trabajo del centro es monitorearla. “Cogemos muestras en el agua, en superficie y columna de agua, para estudiar si hay macro o micro basuras”. 

En el caso de microplásticos, que son inferiores a medio centímetro, utilizan las redes Neuston, las que se usarán la próxima semana como “barrera antipellets”. Como explica Ruiz, se arrastra por la superficie y todo el agua que entra se va filtrando. Así, todo lo que tenga tamaño superior a medio centímetro, se queda dentro y luego se analiza. 

En el caso de que haya gran cantidad de pellets, que llegue una mancha con muchos, “aparte de para el muestreo podrían servir para recogerlos”. Pero, ¿es eficiente una recogida en mar? “Depende”. Como explica la experta, en el Golfo de Bizkaia “hay basura dispersa”. De hecho, en Azti hacen cada año campañas financiadas por el Gobierno vasco para hacer estimaciones para abundancia de anchoa. Sin embargo, se aprovechan para hacer avistamiento de basuras. 

Como explica Ruiz, “esta esquina del Golfo de Bizkaia favorece la retención de basuras marinas, por los patrones de viento y corriente tiende a acumularse aquí, es un handicap que tenemos”. Por ello, “somos más propensos a ver más basura porque se acumula con mayor facilidad”. De hecho, subraya que “hemos detectado que en la zona costera de Euskadi hay zonas de acumulación de basura”, explica la experta. Motivo por el cual el centro científico y tecnológico ha comenzado con un proyecto para estudiar los procesos que hacen que “aparezcan estos frentes”.

Recogida en mar

Una característica que puede sin embargo tener sus ventajas. Y es que ir a recoger en mar “es eficiente cuando hay estos frentes”. Sin embargo, “no son persistentes en el tiempo, se forman y a las horas desaparecen. Es difícil estudiarlos pero a día de hoy estamos viendo cómo se generan. Sabemos que existen, y en estos caso sí es eficiente la recogida de basura”, explica.

De hecho, explica que desde hace años en Iparralde hay un barco que durante el año recoge algas y en verano recoge en esas zonas de basura. Y así evita que llegue a las playas. Por eso, Ruiz concluye: “Si son en zonas de acumulación sí tiene sentido recoger en mar; sin embargo, sacar un barco sin tenerlo claro... igual no”. Por ello, “lo ideal es busca las zonas de agregación, y trabajamos para localizarlas prácticamente en tiempo real”.

Así las cosas, como zanja la experta de Azti, lo que ha ocurrido con el buque Toconao “sirve para alertarnos y hacer un poco de sensibilización sobre el tema”. Y es que aunque admite que es un accidente con un impacto importante, “por desgracia no es novedad, convivimos con ello, ya que tenemos pellets en nuestras costas a lo largo de todo el año”.