El Gobierno vasco facilitará a los reclusos evangélicos "el desarrollo espiritual y la asistencia religiosa" dentro de la cárcel, una posibilidad de la que ya disponen los presos católicos y musulmanes.

Con este objetivo la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno vasco, Nerea Melgosa, ha firmado este viernes con el consejero de Asistencia Religiosa Evangélica, Julio García Celorio, un convenio similar a los suscritos ya con la Conferencia Episcopal y la Comunidad Islámica de España.

Facilitar la libertad religiosa

"Es voluntad de la Administración Penitenciaria garantizar la libertad religiosa de las personas privadas de libertad y facilitar medios para su ejercicio", ha explicado la consejera.

El convenio firmado con la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (Ferede) recoge, entre otros puntos, que los centros penitenciarios tendrán que habilitar un espacio para las visitas religiosas a los internos.

También deberán facilitar la celebración de actos de culto, servicios rituales y honras fúnebres con arreglo a los ritos de esta religión y que estas ceremonias las dirijan ministros evangélicos.

Subvenciones

El acuerdo recoge asimismo que se subvencionarán iniciativas de Ferede para apoyar, asesorar y "fortalecer las capacidades" de las entidades religiosas cuando asistan a reclusos, lo que incluye formar a los ministros de culto y profesores de enseñanza religiosa que vayan a asumir esta tarea.

En Euskadi hay 146 entidades evangélicas y en Ferede constan integradas 128 entidades religiosas o lugares de culto evangélicos, según datos del Observatorio del Pluralismo Religioso citados por la consejera.