La positividad ha caído al 6,2% en Euskadi, una cifra que no se registraba desde principios de julio. Pese al significativo descenso en este indicador de la pandemia, la presión hospitalaria se sigue manteniendo en niveles muy altos, con 71 personas ingresadas en las UCI de los centros sanitarios vascos.

Según los últimos datos hechos públicos ayer por el Departamento de Salud del Gobierno vasco, el sábado se realizaron 4.561 pruebas diagnósticas, entre PCR y test de antígenos, con un resultado de 281 positivos, lo que represente 212 menos que en la jornada anterior. Hay que tener en cuenta que también se realizaron menos test, ya que el viernes se llevaron a cabo un total de 5.146.

Por territorios, 144 positivos se detectaron en Bizkaia, 86 en Gipuzkoa y 43 en Araba, mientras que ocho nuevos contagios corresponden a personas que tienen su residencia fuera de la CAV. La disminución en el número de casos positivos se ha producido en los tres territorios vascos: 116 menos en Bizkaia, 62 menos en Gipuzkoa y 22 menos en Araba.

Con todo, la positividad se ha reducido en Euskadi al 6,2%, lo que supone un descenso de más de tres puntos en este indicador respecto al viernes, cuando se elevaba hasta el 9,6%, con 493 nuevos positivos de un total de 5.146 test efectuados.

Este porcentaje de positividad representa la cifra más baja desde el pasado 5 de julio, cuando este indicador se situaba en el 4,8%. Ya al día siguiente se elevó al 6,8% y, desde entonces, ha mantenido una tendencia ascendente imparable, hasta llegar al 14,1% los días 22 y 24 de julio. Durante prácticamente todo julio y agosto, el porcentaje de positividad se ha mantenido por encima del 10%, salvo contadas jornadas como la del 2 de agosto (con un 9,5%), el 9 (un 9,1%), el 16 (9,4%) o el 18 (un 9,7%); no ha sido hasta el día 22 cuando este indicador ha abandonado los dos dígitos.

Pese al descenso tanto en el número de nuevos casos como en el porcentaje de positivos, la presión hospitalaria sigue en cifras alarmantes. El sábado ingresaron en planta 35 nuevos pacientes covid, los mismos que el viernes, mientras que otras 71 personas se encontraban atendidos en las unidades de cuidados intensivos, dos más que en la jornada anterior.

Euskadi llega con estos indicadores a la reunión del Consejo Asesor del LABI que hoy presidirá el lehendakari Iñigo Urkullu a las 9.30 horas en Lehendakaritza y en la que se podrían anunciar ajustes en las medidas para hacer frente a esta quinta ola de la pandemia.

El pasado jueves, los expertos de la comisión técnica que asesora al LABI se mostraron dispuestos a "ajustar" las medidas de cara al mes de septiembre, ya que los indicadores presentan una clara mejoría en las últimas semanas, aunque no tan acusada como sería deseable en los hospitales, donde el número de ingresados en UCI sigue siendo todavía muy elevado. De hecho, aquel día Euskadi abandonó la zona roja al situar su tasa de incidencia acumulada en 14 días por debajo de los 400 casos por primera vez desde el 13 de julio y rozar los 900, con 873,16, el 30 de julio.

Esos "ajustes" podrían suponer aliviar algunas de las medidas vigentes hasta ahora en Euskadi, como el cierre de la hostelería y de todas las actividades sociales y culturales a la 1.00 horas. Los aforos están reducidos al 35% en todos los locales e instalaciones, al 20% en recintos de más de 5.000 espectadores, como estadios de fútbol. Las discotecas y pubs no adaptados a servicios de hostelería siguen cerrados.

Sin embargo, y pese a la buena evolución de los últimos días, hay que tener en cuenta otros factores como la incidencia de la variante delta -supone el 90% de los casos- y la capacidad de mutación del virus, que hace que Euskadi se encuentre actualmente en un momento de incertidumbre ante la imprevisibilidad del coronavirus.

6,2%

La positividad cayó el pasado sábado al 6,2%, un porcentaje que se no registraba en Euskadi desde el 5 de julio, cuando se situó en el 4,8%. Desde que al día siguiente subió ya al 6,8%, ha estado prácticamente todo el verano por encima del 10%.