El número de personas que solicitó protección internacional en la Comunidad Autónoma del País Vasco aumentó significativamente en 2019, que presentó la cifra récord de 4.827 peticiones. El 85,2% procedía de Latinoamérica, pero la mayoría de las demandas fueron desestimadas por las autoridades estatales, a excepción de las peticiones venezolanas, aceptadas por razones humanitarias. La sociedad vasca ve con buenos ojos la asistencia a estas personas demandantes de asilo, quienes, principalmente, eligen como su primer destino Bizkaia, seguido de Araba y, en menor medida, Gipuzkoa.

Estas son algunas de las cifras que se desprenden del informe trimestral Panorámica. Un documento que, en su número 79, analiza las solicitudes de protección internacional realizadas en la CAV y el derecho de asilo.

Según la Panorámica de este trimestre, el incremento de peticiones creció exponencialmente en la CAV en los últimos tres años. En concreto pasaron de 970 solicitudes en 2017 a 4.827 en 2019. Una cifra que descendió el año pasado, como consecuencia de la pandemia y las restricciones derivadas de la misma y que se han excluido en el informe.

Este significativo aumento de la tendencia fue consecuencia, principalmente, de las solicitudes presentadas por personas procedentes de Latinoamérica, en especial, de Venezuela, Colombia y Nicaragua, que se incrementó en últimos años y supusieron el 85,2% de todas las registradas en 2019. Países europeos no comunitarios, como Georgia, aportan también una cifra considerable, aunque en menor medida. Son territorios, todos ellos, que presentan una situación socioeconómica y política excepcionalmente convulsa.

Según los datos aportados por la Panorámica de Ikuspegi, la gran mayoría de las solicitudes de asilo presentadas a nivel estatal obtuvieron una resolución desfavorable por parte de las autoridades; a excepción de las que llegaron de Honduras, con un 19,3% de solicitudes aceptadas, y Nicaragua, con un 15,8%.

Venezuela, un caso especial

Especial atención merece el caso de Venezuela. Mientras que únicamente el 0,1% de quienes lo solicitaron obtuvo el estatuto de refugiado, un 99,4% logró la protección por razones humanitarias. Esta circunstancia se debe, según destaca la Panorámica, a que la Comisión Interministerial de Asilo y Refugio propuso en 2019 conceder la autorización de residencia por razones humanitarias a todas las personas de nacionalidad venezolana cuyas solitudes de protección internacional hubieran sido denegadas en otros ámbitos.

Por otro lado, el documento refleja la notable aceptación que tiene este colectivo entre la sociedad vasca. Desde que el Observatorio empezara a medir las actitudes hacia la población de origen extranjero, se constata que la gran mayoría de la población vasca ve con buenos ojos la asistencia a las personas refugiadas; un porcentaje que se ha incrementado significativamente desde 2015 hasta alcanzar al 94,9% de las personas consultadas en 2020.

Las panorámicas son una serie de publicaciones de Ikuspegi-Observatorio Vasco de Inmigración que tienen periodicidad trimestral, cuyo objetivo es dar una visión general sobre distintos aspectos el fenómeno migratorio en la CAV. Ofrece tanto información general sobre la evolución de los flujos migratorios como monográficos centrados en temas educativos o laborales.

En corto

Desde Latinoamérica. El 85,2% de las peticiones de asilo corresponden a ciudadanos procedentes de Latinoamérica y aunque la mayoría de las demandas fueron rechazadas, las realizadas por ciudadanos venezolanos tuvieron éxito "por razones humanitarias".

Gran aceptación. Los ciudadanos vascos se muestran favorables a prestar asistencia a las personas refugiadas, un porcentaje que ha ido creciendo significativamente en el último lustro hasta alcanzar el año pasado un respaldo del 94,9% de la población residente en la CAV.