- El Gobierno vasco dará a conocer hoy el nuevo paquete de medidas que pondrá en marcha para tratar de contener la imparable expansión del coronavirus en Euskadi. Según avanzó ayer la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, serán restricciones que se adoptarán de forma "quirúrgica", es decir, allí donde el virus tenga una mayor incidencia. "Hoy en día se hacen muchísimas pruebas, se detecta dónde tenemos el problema, dónde está el foco y somos capaces de adoptar medidas de una forma más discriminada. Ese es el camino que vamos a seguir transitando", señaló, sin descartar entre ellas el toque de queda. Además, también anunció que estudian ayudas para el sector del turismo y la hostelería, que se verán afectados por las nuevas limitaciones.

Euskadi entró ayer en fase de emergencia sanitaria que permitirá al lehendakari en funciones, Iñigo Urkullu, asumir el mando único en la crisis sanitaria y adoptar medidas adicionales a las que se acordaron el pasado viernes entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, que todavía no han entrado en vigor en la CAV. La semana pasada dejó en Euskadi un importante repunte de nuevos casos, con más de 500 contagios diarios -similares a los que se registraban a finales de marzo, en pleno confinamiento- y picos de hasta 610 en un solo día, el tercer dato más alto desde que la pandemia llegó a la CAV y solo superados los días 25 y 26 de marzo. Solo la pasada semana, entre el 10 y el 16 de agosto, se registraron 3.256 nuevos positivos, un millar más que en los siete días anteriores. "Las circunstancias actuales y su especial extensión, susceptible de afectar a la sociedad en su conjunto y a los más diversos sectores sociales y económicos, hacen necesaria la asunción por el lehendakari de la dirección y coordinación de las actuaciones de emergencia, pasando a su directa dependencia la estructura organizativa del Plan de Protección Civil de Euskadi", recoge la normativa que regula el paso a esta nueva fase.

El Boletín Oficial del País Vasco publicó ayer las dos órdenes y el decreto que decretan la emergencia sanitaria: una, de la consejera de Salud, Nekane Murga, en la que se solicita la activación formal del Plan de Protección Civil de Euskadi; otra, de la responsable de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, para activarlo, y un decreto por el que el lehendakari asume la dirección del Plan. Precisamente hoy se celebrará la primera reunión de su comité asesor, presidida por el lehendakari con algunos de sus consejeros, los tres diputados forales, el presidente de Eudel, los alcaldes de las tres capitales vascas y el delegado del Gobierno español en Euskadi. En esa primera reunión se concretará una orden que recogerá tanto las once medidas aprobadas entre el Gobierno español y las comunidades autónomas -clausura de las discotecas, cierre de bares y restaurantes a la 1.00 hora o prohibición de fumar en la calle mientras no se mantenga la distancia de seguridad-, como las que prepara el Ejecutivo vasco.

De ese primer encuentro saldrá una orden que incluirá las once medidas aprobadas por el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas el pasado viernes y las que prepara el Gobierno vasco. El Ejecutivo de Gasteiz adelantó que estarán orientadas a la restricción de aforos, de agrupaciones de personas, de horarios de hostelería y del transporte público nocturno. Se descarta, eso sí, un confinamiento generalizado como el de marzo, aunque podrían realizarse de forma puntual en algunas zonas donde se produzcan brotes importantes. Para que entren en vigor, todas las medidas que se adopten en la reunión deberán ser publicadas en el Boletín Oficial del País Vasco, probablemente mañana mismo.

Medidas "quirúrgicas"

Precisamente ayer, la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, se refirió a estas nuevas medidas, que se adoptarán de manera "quirúrgica" donde se produzcan más casos, ya que la situación actual es diferente a la que existía en marzo, cuando no había medios para detectar los contagios. "Esa no es la situación actual. Hoy en día se hacen muchísimas pruebas, se detecta dónde tenemos el problema, dónde está el foco, y somos capaces de adoptar medidas de una forma más discriminada. Ese es el camino que vamos a seguir transitando", afirmó en una entrevista concedida a la Cadena Ser. Por ello, avanzó que "habrá medidas más restrictivas allí donde el virus tenga una especial incidencia".

Tapia se refirió en concreto a la posibilidad de decretar un toque de queda, como el establecido en la localidad belga de Amberes y del que habló el propio Urkullu, descartando que se vaya a adoptar dicha medida de forma global en toda la CAV. "Somos conscientes de que eso no puede ser una medida generalizada a día de hoy, pero también se han establecido en Euskadi, en determinados municipios, donde ha habido focos, restricciones horarias e incluso ha habido confinamientos puntuales en algunos bloques de viviendas, donde el virus tenía especial incidencia", recordó. A su juicio, "quizá de manera quirúrgica, habría que valorarlo, pero no de una forma general ni en este momento, sino para circunstancias en las que el virus está teniendo especial incidencia en zonas". "El virus no ha desaparecido en ningún lugar del mundo. Tenemos que ser conscientes de que no podemos vivir confinados como en marzo y abril, y tenemos que vivir en la calle de una forma distinta, un poquito más controlada", reconoció la consejera.

Tapia advirtió de que las medidas adoptadas tendrán un impacto en sectores como el turismo y la hostelería, para los que analizan ayudas que les permitan "sobrevivir". "Son sectores importantes en nuestra vida de ocio, en nuestra vida social, y tenemos que seguir preservándolos y ayudando a que hagan esta transición -hasta que exista una vacuna efectiva-, que va a ser complicada para toda la sociedad, para todo el conjunto de la economía y para ellos de una forma un poquito más especial", señaló.

Al mismo tiempo, pidió que no se "demonice" al sector de la hostelería, ya que "no es el culpable de lo que nos está pasando. Somos nosotros mismos los que estamos un poco más relajados de lo que debiéramos", finalizó Tapia.

Otros datos

Nafarroa. La comunidad foral adaptó ayer su normativa a las nuevas limitaciones acordadas por el Consejo Interterritorial de Salud para frenar los rebrotes del coronavirus y desde hoy prohíbe fumar sin guardar la debida distancia entre personas, adelanta el cierre de bares y restringe las visitas en centros sociosanitarios. El Gobierno de Nafarroa adelantó así sus previsiones y, en una sesión extraordinaria, aprobó el decreto foral con las medidas, que serán publicadas hoy en su Boletín Oficial. El vicepresidente del Gobierno, Javier Remírez, destacó que, debido a la pandemia, "estamos ante un reto mayúsculo y es momento y hay necesidad de tomar decisiones", en este caso "en un contexto de rigor y de solidez jurídica".

Cantabria. Cantabria adoptó ayer las medidas consensuadas entre las comunidades autónomas, con algunas incluso más restrictivas, como ampliar a cuatro metros la distancia para poder fumar en la vía pública y las playas en el caso de que en el entorno haya niños, mayores y otras especialmente vulnerables. Las terrazas de hostelería que permitan fumar, además, tendrán que reducir su aforo a un 50%. Junto a ella, también Galicia y Castilla y León implementaron ayer las nuevas medidas acordadas con Sanidad para frenar los brotes del covid-19.