Tras rozar el domingo los 200 casos de coronavirus -recogiendo las PCR del sábado-, Euskadi consiguió frenar ayer el avance imparable de la pandemia con noventa positivos declarados. Sin embargo, por primera vez en varios días, el mayor número de contagios se trasladó de Gipuzkoa a Bizkaia y sobre todo a la capital vizcaina que, con 21, dobló las infecciones. Buena parte de ellas se concentran en los barrios de Mina del Morro y Miribilla que se han convertido en una zona caliente del virus al detectarse ocho casos. Justo al lado, en Bolueta, se registran otros dos. Se da la circunstancia de que hace una semana, treinta niños, ocho monitores y sus familias fueron puestos en cuarentena tras confirmarse un positivo en una de las pequeñas que participaba en las colonias del centro Mina del Morro. Y aunque Osakidetza evitó ayer dar información sobre este caso, todo apunta a que los nuevos casos podrían estar vinculados a este aislamiento.

Controlados o en vías de control los principales rebrotes guipuzcoanos que se iniciaron en Ordizia, actualmente es Bizkaia la que acumula 63 de los noventa casos por veinte de Gipuzkoa y cinco de Araba, tras las 3.682 PCR realizadas el lunes.

Un día más volvió a repetirse el factor juventud como denominador común de los contagiados, ya que el 40% de los nuevos infectados, 41 personas, tienen entre 10 y 29 años, mientras en la franja de edad comprendida entre los 60 y 89 años se contabilizan nueve positivos. Pese a esa media de edad tan baja, comienzan a llegar pacientes a los hospitales vascos. En las últimas 24 horas ingresaron en planta por covid-19 cuatro personas, mientras dos permanecen ingresadas en la UCI.

Además de los casos de la capital vizcaina, el mayor foco activo sigue en Ermua, con trece nuevos positivos, como consecuencia de las celebraciones de la selectividad en municipios vecinos, lo que ha obligado a restringir el aforo y los horarios de la actividad hostelera. En una semana en la que la localidad debería haber celebrado sus fiestas patronales, los ánimos están por los suelos. Aitor Rupérez, presidente de la Asociación de Comerciantes y Hosteleros, reconoció ayer que los bares de Ermua no atraen ni a la mitad de sus clientes por el “miedo de la población a contraer el virus”. “Los bares no se llenan al 50% porque la gente tiene miedo. Cuando nos dieron vía libre, las terrazas estaban llenas, todo el mundo fuera, fiestas de fin de curso... En fin. Unos por otros y, al final, a este punto hemos llegado”, se lamentó.

Rupérez admitió que los ánimos de los propietarios de bares y restaurantes y de la población en general “están bajísimos”, lo que influye de forma negativa en las ventas de todos los comercios. “Si no podemos salir a cenar o no podemos salir a tomar un café... ¿para qué me voy a comprar ropa nueva, si no la puedo lucir?”, manifestó. El presidente de esta agrupación lamentó que la eclosión de contagios haya vaciado de nuevo Ermua, donde han regresado las imágenes de calles vacías, habituales durante el confinamiento.

La gente se está confinando. Hay un montón de casos de niños pequeños que han ido a colonias; se han contagiado los monitores y los niños y sus padres tienen que hacerse análisis. Todo el mundo conoce a alguien que está recluido en casa. Si no es el vecino, es un primo, alguien de la cuadrilla...”, aseguró. “En Eibar no se celebraron las fiestas, pero dejaron abrir los bares por la noche. Hubo jaleo. Para los bares fue pan para hoy y hambre para mañana. Viendo lo que hemos visto, espero que la población de Ermua haya aprendido”, confesó.

En Gipuzkoa, que contabilizó ayer 43 positivos menos, Eibar continúa siendo el municipio que registra mayor número de nuevos contagios, diez, mientras Deba y Elgoibar detectan tres casos más, y Zarautz, otros dos.

Nafarroa registró en las últimas horas 98 nuevos casos positivos, de los que 22 corresponden al brote del barrio iruindarra de Mendillorri, relacionado con el ámbito social y de ocio nocturno, que acumula 116 casos con tendencia al alza.

El sistema de cribado se activó a raíz de confirmarse casos en el camping de Zarautz. De los brotes anteriores, se detectó un nuevo caso de la boda de Tutera, que acumula 43 contagios.