- El paréntesis obligado en la mayoría de las actividades profesionales afecta también a los abogados y abogadas, tanto en sus labores judiciales como en las que realizan en despachos y firmas legales. Las consecuencias de este parón involuntario son fundamentalmente económicas, pero no exclusivamente, ya que también se prevé que cuando el estado de alarma sea levantado y se retome la actividad, se producirá un enorme cuello de botella en los juzgados y el retraso, que ya de por sí acumulan muchas causas, se agravará, con un claro perjuicio para los letrados y sus clientes.

Con el fin de ayudar a los abogados y abogadas de Bizkaia, el Colegio de la Abogacía de este territorio ha acordado suspender el cobro de las cuotas del segundo trimestre y crear un fondo de solidaridad. "Todavía es pronto, llevamos pocos días y no sabemos lo que va a durar esto. Pero para ayudar un poco a los colegiados en estos primeros momentos hemos decidido suspender el cobro de cuotas y en función de cómo se desarrollen los acontecimientos tomaremos nuevas decisiones. También hemos creado un fondo de apoyo económico para ayudar a los compañeros y compañeras que lo requieran. El fondo está dotado con medio millón de euros y proviene de ahorros de otros años en los que ha habido bonanza. Ahora tenemos que desarrollar un reglamento para ver cómo se van a repartir y entregar esas cantidades porque creemos que hay que individualizar cada caso", explicó a DEIA el decano del Colegio de la Abogacía de Bizkaia, Carlos Fuentenebro.

El decano destacó que "la crisis del coronavirus nos a va a afectar a todos los abogados porque, para empezar, los juzgados están cerrados y toda la actividad judicial ha decaído. Y también los temas extrajudiciales, porque la gente está en sus casas y ese tipo de problemas, salvo que sean muy urgentes, han quedado aparcados".

Fuentenebro reconoció que "dentro del colectivo va a haber personas más y menos afectadas. Los laboralistas y mercantilistas, los que llevan concursos, probablemente tendrán mucho más trabajo cuando esto acabe, mientras que habrá otros abogados, que son la mayoría, que lo van a pasar mal, igual que el resto de la población". El decano puntualizó que el colegio "sigue funcionando" y prestando los servicios para los Juzgados de Guardia, de Violencia de Género y Turno de Oficio. "Según las normas del Consejo General del Poder Judicial los juzgados solo funcionan para los temas urgentes, para autorizar enterramientos, los juzgados de guardia, etc. y nosotros seguimos prestando asistencia al detenido y hay turno de oficio para casos graves en los que haya que actuar inmediatamente. Mantenemos también la asistencia en comisarías y en juzgados en todos los partidos judiciales", especificó Fuentenebro.

Respecto a las consecuencias económicas que el estado de alarma tendrá para la mayoría de los abogados y abogadas de Euskadi, el decano del Colegio vizcaino apuntó que "los despachos de tamaño medio o grande, que tienen personas con relación laboral, acabarán haciendo un ERTE, pero la mayoría de los despachos son de dos o tres personas, que normalmente son autónomos y, si esto se alarga, lo van a pasar muy mal".

La falta de actividad de la mayor parte de los abogados colegiados también repercute en el día a día del Colegio, que tiene a parte de su personal teletrabajando y prepara un ERTE para otros empleados. Además de las medidas económicas, solidarias y de organización del trabajo adoptadas, el Colegio de la Abogacía de Bizkaia ha decidido facilitar a todos los colegiados el acceso a los cursos realizados en el último año. "Vamos a subir a nuestra plataforma esos cursos que fueron de pago para que cualquier colegiado los pueda ver en streaming con el objetivo de que ahora que tienen más tiempo aprovechen para formarse", anunció Carlos Fuentenebro.

"Los laboralistas y mercantilistas, probablemente tendrán mucho más trabajo cuando esto acabe"

"Vamos a subir los cursos impartidos para que los abogados puedan seguirlos"

Decano del Colegio Abogacía de Bizkaia