BARCELONA. Los Mossos d'Esquadra están investigado la muerte el matrimonio cuyos cuerpos fueron encontrados sin vida a las 23,55 horas de anoche, con evidentes signos de violencia.

Todo indica que la pareja llevaba varios días muerta en su vivienda, situada en el piso 6º-2ª del edificio número 34 de la calle Mossèn Amadeu Oller, de Barcelona.

Según la policía autonómica catalana, y a la espera del resultado de la autopsia que será la que determinará las causas del fallecimiento, todas las hipótesis están abiertas.

El aviso lo dieron unos vecinos, ya que desde hacía días sentían una fuerte olor procedente del interior del piso de los fallecidos, a los que además hacía días que no veían.

Tras la alerta de estos vecinos, la policía localizó a un hijo de las víctimas que acudió para abrir la puerta y encontró los cuerpos sin vida del matrimonio a las 23.55 de anoche.

La División de Investigación criminal (DIC) de la Región Metropolitana de Barcelona se ha hecho cargo de la investigación, y la autoridad judicial ha decretado secreto de sumario.

Los investigadores han comprobado que la puerta de entrada a la vivienda estaba cerrada por dentro y no tiene signos de haber sido forzada, lo que podría descartar el posible móvil del robo o la intervención de una tercera persona, aunque ello no podrá concretarse hasta que no finalice la investigación.

Los vecinos del matrimonio de ancianos se han mostrado consternados por el suceso y han señalado en declaraciones a Efe que hace días que no los veían por el barrio y que el piso en el que residían desprendía muy mal olor.

"Estamos consternados. Hace mucho tiempo que no los veía por aquí. La última vez que hablé con el marido me dijo que la mujer, que sufría una depresión, no acababa de reponerse y que él se sentía impotente por no poder ayudarla", ha explicado una vecina, en declaraciones a Efe.

Varios vecinos han coincidido en señalar que hacía días que emanaba un olor intenso del rellano del piso en el que residían y que, ante esa circunstancia y que no contestaban a las llamadas a la puerta, decidieron llamar a los Mossos d'Esquadra, que, a su vez, avisaron al hijo del matrimonio.

Cuando el hijo, que vive también en el barrio, abrió anoche la puerta, el hedor se extendió aún más, han rememorado los vecinos, que incluso se habían propuesto saltar por la ventana al piso ante el fuerte olor que salía."La señora Piedad, estaba enferma, con depresión y el también, que la cuidaba a ella. Los vecinos estamos muy consternados por esta mala noticia, es muy fuerte. Los vi la semana pasada. Es uno de los primeros matrimonios que se instaló en esta finca", ha señalado otra vecina.