DONOSTIA. Los hechos sucedieron a última hora de la tarde del sábado, durante uno de los últimos servicios diurnos, cuando un pasajero solicitó al conductor que parase en un punto concreto, donde no había parada, solicitud que no fue atendida por el chófer, quien detuvo el autocar en la siguiente parada, en el municipio de Zarautz.

El pasajero reaccionó de manera agresiva y, antes de abandonar el vehículo, golpeó y empujó al conductor, que permanece de baja desde entonces, han informado a EFE fuentes del comité.

El comité permanente ha convocado una concentración mañana en la base de Euskotren en Zumaia para expresar su "absoluta repulsa ante ésta y todas las agresiones sufridas por los trabajadores durante su jornada laboral".

"Resulta absolutamente inaceptable que haya trabajadores que reciban insultos, amenazas o incluso agresiones por el simple hecho de realizar su trabajo", ha destacado el comité.