Absueltos al no probarse que hicieran cambiar el testamento a una anciana

GASTEIZ. La Fiscalía pedía cuatro años y medio de cárcel para la mujer, vecina de la anciana, y al notario por un delito de estafa en concurso con otro de falsedad en documento público.

La sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Álava considera sin embargo que cuando la mujer llevó a cabo el cambio de testamento no se ha probado que estuviera aquejada de un deterioro cognitivo de tal entidad que le impidiera conocer la trascendencia de su acción.

Añade que la mujer, que en el momento de los hechos, enero de 2015, tenía 83 años, estaba viuda y no tenía descendencia, llevó a cabo una serie de modificaciones en su testamento para dejar su vivienda a la acusada pero mantuvo una parte a favor de las tres hijas de una prima carnal y a otras instituciones benéficas sin que nadie haya objetado nada al respecto.

También explica la resolución que no se ha probado que los acusados manipularan la voluntad de la anciana y que no fue hasta diciembre de 2015 cuando la mujer fue declarada incapaz para el autogobierno y administración de sus bienes.