bilbao - El descubrimiento del sistema Crispr, que funciona como un guía en el genoma humano permitiendo resolver problemas genéticos y que es posible gracias a Francisco Mojica, microbiólogo de Fisiología, Genética y Microbiología de la Universidad de Alicante, protagonizó ayer la sesión Crispr en la segunda jornada del encuentro Biospain 2016. “El sistema Crispr actúa como transporte para unas proteínas asociadas, llamadas CAS, que funcionan como tijeras, permitiendo cortar el ADN e iniciando el sistema de reparación de la propia célula”, aseguró ayer Mojica, que lo compara con un GPS que guía por el genoma humano y que puede programarse. “Lo más interesante es que se le pude decir dónde tiene que ir. Esto funciona en vivo, no solo en el tubo de ensayo, y abre un mundo de posibilidades para la investigación de problemas genéticos y su cura”, afirmó.
Este sistema, conocido como corta y pega genético, se completa con las nuevas técnicas de laboratorio que permiten intervenir en el sistema de reparación de la propia célula a través de fragmentos de ADN, que se introducen como una tirita que subsana el error en una secuencia genética. Esto es clave, según Mojica, para la cura de enfermedades: “Son palabras mayores, estamos hablando de poder editar el ADN y reparar, en definitiva, un defecto genético”. De esta forma, se pueden bloquear genes, evitar que se produzca una proteína que podría ser patogénica, o cambiar la información de forma muy sencilla para resolver problemas genéticos. Desde otro punto de vista, también se podrían reproducir estos defectos genéticos en animales para investigar en profundidad sobre estas enfermedades.
Este descubrimiento que ha revolucionado la ingeniería genética coloca a Mojica en la quiniela de los Nobel. “Es el científico español que más cerca está de que le puedan otorgar el Nobel”, señaló Lluis Montoliu, del Centro Nacional de Biotecnología(del CSIC), que junto a su grupo de investigación fue el primero en España en implementar en animales la tecnología Crispr-Cas9.
Según Montoliu, que investiga enfermedades raras, Mojica está nominado para el Nobel de Medicina y “ahí va a tener una oportunidad” . “Sin su análisis inicial nadie hubiera podido seguir. Hoy hay que atribuirle ese momento eureka que es el que puso a caminar todo lo que ocurrió después”. - DEIA