Bilbao - La portavoz de JxCat en el Congreso, Laura Borràs, volvió ayer a insistir en que es inocente, ya que aseguró que bajo su dirección en el Institut de les Lletres Catalanes (ILC) “no ha habido ningún perjuicio para el erario público”, y denunció la actuación de “cloacas del Estado”, que solo buscan “intoxicar”. Así se expresó Borràs en declaraciones a los periodistas en los pasillos del Parlament después de que ayer el Tribunal Supremo acordara abrirle un procedimiento por presuntas irregularidades en la adjudicación a un amigo de 18 contratos por valor de 259.863 euros cuando dirigía el ILC, entre 2013 y 2017.

“En este Estado la presunción que cuenta es la presunción de culpabilidad”, lamentó Borràs, que garantizó no haber cometido “ningún delito”, algo que espera poder defenderlo “en sede judicial” y no ante la prensa. Borràs criticó el “trabajo mediático para tratar de ensombrecer” su figura y “vincular” su nombre con la corrupción. Afirmó asimismo que tuvo conocimiento de que se le ha abierto un procedimiento por la prensa y no por sus abogados. Además, descarta apartarse de la vida política, dado que recordó que no es militante del PDeCAT y que, por tanto, no se siente concernida por el reglamento interno de este partido. “Mi código ético es mi código ético personal”, apuntó. - DEIA