Bilbao - El vicrepresident de la Generalitat y coodinador general de ERC, Pere Aragonès, tiene claro que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, no responde a los requerimientos al diálogo por parte del president Quimm Torra porque tiene miedo a un “desgaste electoral” el próximo 10-N. Así, a juicio de Aragonès, tras el papel de firmeza que muestra Sánchez lo que se esconde en el fondo son meros cálculos electorales. Aragonès realizó estas declaraciones en desayuno informativo en Madrid donde aseguró que el camino a la independencia de Catalunya es “irreversible”, propuso retomar la Declaración de Pedralbes y abrir una mesa de diálogo “sin vetos” a los temas que se pueden tratar, garantías de cumplimiento y votación en un referéndum.

En cuanto a los contactos con el Gobierno español en funciones, el vicepresidente catalán reconoció que mantiene abierta la vía de conversación con la vicepresidenta, Carmen Calvo, con la que habló en dos ocasiones la semana pasada. Sin embargo, dejó claro que sus conversaciones no pueden sustituir el “diálogo necesario” entre Pedro Sánchez y Quim Torra, a pesar, señaló, de que a Sánchez no le guste Torra y “al revés es parecido”. “Pero es lo que hay”, exclamó. No obstante, admitió que es posible que Sánchez no responda al teléfono a Torra para llegar al 10-N con “menos rasguños”, pero quiere que el presidente en funciones lo diga claramente, porque, afirmó, “desde el miedo no se gobierna”.

En su intervención, dejó claro en todo momento que no van a renunciar a la independencia y que si el Gobierno español no negocia, cada vez serán más los independentistas por no tener una propuesta por parte del Estado. A su juicio, para millones de catalanes el autonomismo “ha muerto” y el camino a la independencia es “irreversible” de una manera cívica, pacífica y democrática.

El número dos del Govern afirmó que se debe acometer un mesa de negociación en la que deben estar los dos gobiernos, aunque admitió que pueden ir acompañados de las mayorías parlamentarias. Insistió, eso sí, en que es el momento de la política, de “empezar a dar pasos” en el diálogo porque “el bloqueo no es bueno”, el “conflicto corre el riesgo de enquistarse”. De hecho, advirtió de que el problema no es de orden público, ni de convivencia entre catalanes.

No obstante, y aunque no lo vinculó expresamente, Aragonès señaló que no parece razonable que esa mesa de negociación que él propugna se produzca con los políticos catalanes en prisión condenados por el Supremo. “Es cierto que sería razonable que todos los viéramos así que no se puede gestionar un diálogo con los principales protagonistas encarcelados”, señaló. Por ello, reclamó que haya un mecanismo para amnistiar a los políticos presos. Según Aragonés, la Constitución prohíbe el “perdón general” pero no la amnistía, por la que apostó porque supondría, según su criterio, que no se ha cometido ningún delito por parte de los dirigentes políticos catalanes.

Respuesta de carmen Calvo Por su parte, el Gobierno español está dispuesto a buscar una salida política en Catalunya, pero “dentro de la ley”, una vez que se supere la crisis provocada por los incidentes violentos en protesta por la sentencia del Supremo y después de que Quim Torra condene esos altercados y las formaciones independentistas renuncien a la unilateralidad.

Así lo aseguró ayer la vicepresidenta Carmen Calvo -la interlocutora de Aragonés- al ser preguntada por la propuesta de diálogo lanzada por el vicepresidente catalán y dirigente de ERC. “Habrá diálogo y habrá política. Cuando todo esto esté reconducido y el presidente Torra condene esa violencia y reconozca que no se puede estar en una institución sólo para una parte de quienes gobierna, este Gobierno tiene que estar en una salida política, pero dentro de la ley”, señaló.

Eso sí con la coletilla “dentro de la ley” Calvo quiso dejar claro que el referéndum que piden los independentistas está fuera de lugar y que es imprescindible “respetar las reglas de juego” que se dieron los catalanes cuando aprobaron la Constitución “con un rotundo sí” en 1978. “El derecho de autodeterminación no existe, ni en España ni en ningún país”, subrayó. - DEIA