BILBAO. El tren de alta velocidad (AVE) ha vuelto a circular este martes por la mañana entre Barcelona y Figueres (Girona) en ambos sentidos, aunque en vía única por los daños causados en la infraestructura por barricadas en el sur de Girona a las que manifestantes prendieron fuego en protesta por la sentencia del Tribunal Supremo sobre el 1-O.

Fuentes de Renfe han informado a Europa Press de que progresivamente se irán recuperando la frecuencia y horarios habituales.

Durante la noche también se han detectado cortes de fibra óptica en diferentes trayectos de la línea de alta velocidad entre Les Borges Blanques (Lleida) y Barcelona, lo que repercute en los sistemas de detección de caída de obstáculos en la vía, por lo que hay una limitación de velocidad a 160 kilómetros por hora.

INCIDENCIAS A PRIMERA HORA A primera hora de la mañana ha habido incidencias puntuales como una interrupción de la circulación de las líneas R11 y RG1 de Rodalies entre Figueres y Girona por la presencia en la catenaria --entre Sant Miquel de Fluvià y Flaçà (Girona)-- de un árbol que ha sido cortado con motosierra, según ha informado Renfe a Europa Press.

A las 8.35 horas un grupo de personas también ha interrumpido la circulación en Mataró (Barcelona), afectando a trenes de la R1 y la RG1 de Rodalies, y la situación se ha restablecido a las 9.05 horas.

También el primer tren de Lleida hasta Cervera se ha realizado por carretera por los problemas derivados del corte del lunes en Vilaseca (Lleida).

EL PRAT Las aerolíneas que operan en el aeropuerto de El Prat han cancelado este martes 45 vuelos, mientras el aeropuerto recupera poco a poco la normalidad.

Aunque, según fuentes de Aena el aeropuerto funciona "con normalidad", todavía arrastra la resaca de ayer.

Centenares de personas han pasado la noche en el Aeropuerto de Barcelona, que se convirtió ayer lunes en el epicentro de las protestas independentistas contra la sentencia del "procés", lo que obligó a cancelar más de un centenar de vuelos.

El Prat ha amanecido este martes con centenares de personas durmiendo en sillas o en el suelo de la terminal, en donde se han abierto varias salas destinadas a los trabajadores para que los pasajeros puedan descansar.

En el aeropuerto también se pueden ver multitud de colas, tanto en los mostradores de facturación, como en los de reclamaciones, donde igualmente hay gente durmiendo, especialmente en el de Vueling, que ayer canceló un centenar de vuelos al ser la principal aerolínea que opera en el aeropuerto.

A los centenares de personas que ayer perdieron su vuelo se han sumado los viajeros que, tras conocer la situación de ayer, han preferido llegar al aeropuerto con mucha antelación.

A diferencia de ayer lunes, la presencia policial en el recinto es la misma que cualquier otro día y se puede acceder a su interior sin necesidad de enseñar la tarjeta de embarque, ni pasar controles policiales.

Durante esta noche los pasajeros han podido llegar a El Prat con normalidad, después del bloqueo que vivió ayer esta infraestructura por las protestas de independentistas y los enfrentamientos entre policías y manifestantes que colapsaron el recinto.

La protesta, que se saldó con unos 78 heridos, fue desconvocada antes de medianoche.