IRUÑEA. La presidenta del Gobierno de Nafarroa, María Chivite, anunció ayer 160 medidas prioritarias para los próximos 100 días de mandato de un Gobierno que situó en la “centralidad” y para “toda la ciudadanía navarra”. Cien días que antaño eran espacio de cortesía parlamentaria, hoy se han convertido en un programa de acción. Mensaje de que el Gobierno pretende alcanzar cuanto antes a su velocidad de crucero, no perder en ningún momento la iniciativa, y poder llegar a Navidad con material suficiente en su hoja de servicios para rendir cuentas, y construir su propio relato. Con ese horizonte de cien días se presentó Chivite, con medidas como elaborar un Plan de Empleo, dar solución a las prestaciones por maternidad, agilizar la competencia de tráfico o analizar el decreto del euskera. Un mensaje de que indica que su Ejecutivo está “comprometido con la responsabilidad institucional que trasciende a los partidos políticos a los que cada uno de los miembros de este Gobierno pertenecemos”.
Tras defender una “gestión pública responsable”, la presidenta señala que la disposición del Gobierno que dirige es de “diálogo”, de “dialogar con todas las formaciones que se sitúan en este momento en la oposición y así lo haremos, con todas”. Después de hablar de un discurso “hiperbólico” por parte de Navarra Suma y “carente de objetividad”, la presidenta foral añadió que la coalición de UPN, PP y C’s “no va a marcar ni la agenda ni el calendario” del Gobierno. “Las urgencias de Navarra Suma serán de Navarra Suma y las urgencias de la ciudadanía serán las de este Gobierno”, señaló Chivite, para indicar que “el Gobierno se sitúa en la centralidad política”. Sobre EH Bildu, Chivite expuso que “se han situado en el ámbito de la oposición”. “No los veo en una labor destructiva, no”, precisó.
Chivite aseguró que tiene “muy claras” las prioridades de este Gobierno. Cree así que el empleo es la “principal ocupación” del Ejecutivo y precisa que están ya trabajando en la elaboración del Plan 2020-24, desde el diálogo social, “con la participación de todos los agentes económicos y sociales que quieran construir”. La jefa del Ejecutivo navarro explicó que “tanto la consejera del ramo como yo hemos tenido ya reuniones con las centrales sindicales y la patronal, y con las entidades con las que hemos estado hay buena disposición”.
Mencionó también, entre otras muchas medidas, la implantación de un plan extraordinario para reducir las listas de espera sanitarias y una reforma del sistema de becas que garantice la gratuidad en las primeras matriculaciones de los grados de la UPNA. Este último tema, dijo, “tenemos que trabajarlo de la mano de las universidades”. Asimismo, reiteró su “compromiso” de facilitar, antes de fin de año, una solución a las prestaciones por maternidad y paternidad que tributaron en el IRPF, así como de impulsar un pacto social y político en torno a la Educación.
Chivite aboga por “agilizar” las transferencias en materia de tráfico y seguridad vial, y por avanzar en la planificación de la segunda fase del Canal de Navarra. También destacó que se ha creado el grupo de trabajo interdepartamental encargado de analizar el Decreto Foral regulador del uso del euskera en las administraciones públicas.
