Bilbao - Alejada de la primera línea de la política catalana tras dejar su puesto como coordinadora general del PDeCAT en julio de 2018, Marta Pascal abre la puerta a crear un nuevo partido para “trabajar pacientemente para la única solución posible en Catalunya: un referéndum acordado” que no esté supervisado por el expresident, Carles Puigdemont. Pascal alentó ayer la posibilidad de una escisión moderada aunque sin más concreciones. En todo caso, dejó patente el malestar reinante en diversos sectores neoconvergentes con Puigdemont por pretender gobernar desde el exilio. “Catalunya no se puede dirigir desde Waterloo, ni se puede regir desde la emotividad desbordada y la antipolítica”, afirmó.

En estos términos se expresó Pascal en una entrevista en La Vanguardia. Entre otros hechos decisivos en el devenir del procés soberanista, relató sus desencuentros con Puigdemont en la moción de censura que desalojó a Rajoy para colocar de presidente a Sánchez, la enmienda a la totalidad del PDeCAT a los presupuestos que tumbó al dirigente socialista o la renuncia de Artur Mas a la presidencia catalana ante la negativa de la CUP a su investidura.

Cuestionada sobre si se embarcaría en promover una nueva formación política, Pascal afirmó que “podría ser una opción”, recalcando a renglón seguido que “podría ser un horizonte de trabajo”. Tanto es así que mostró sus discrepancias por “la subordinación de David Bonvehí -actual presidente del PDeCAT-” a los dictados de Puigdemont y del núcleo duro del expresident.

“La enmienda a la totalidad a los presupuestos por parte del PDeCAT -ordenada por Puigdemont- fue un grave error”, asevera Pascal. “Teníamos que haber negociado a fondo los presupuestos. ¿Acaso queremos regalar a un partido de extrema derecha el eje de la influencia política en España? El 65% de los electores del PDeCAT quería que se tramitasen los presupuestos”, apuntó. De la misma forma, y al hilo del enmarañado estado actual del procés soberanista, aseguró que “no puede seguir así”. “Soy independentista, pero también creo en el aprovechamiento del autogobierno y en la necesidad de ser útiles a la sociedad”, profundizó. “Hay que salir del actual bucle. Hay que trabajar pacientemente para la única solución posible en Catalunya: un referéndum acordado [con el Gobierno español]. No estoy de acuerdo con la actual situación y creo que ha llegado el momento de actuar”, sostuvo.

Por último, y en referencia a la habitual coalición entre el PDeCAT -y sus siglas predecesoras- y PNV de cara a los comicios europeos, rota de cara al 26 de mayo por la injerencia de Puigdemont, Pascal aseguró “lamentar mucho que no podamos hacer coalición con ellos”.

respuesta de puigdemont Aunque sin mentarla expresamente, pero en lo que fue una velada referencia a las manifestaciones de Pascal, Puigdemont se reivindicó como garante del independentismo al asegurar que JxCat es la fuerza que “incomoda más que cualquier otra opción” en el tránsito a la soberanía. Desde Waterloo y a traves de videoconferencia, el expresident, participó en un acto de JxCat en la que censuró “la política de siempre”, ya que “la experiencia dice que cuando se hace política desde la comodidad” es Catalunya la que salen perdiendo por no haber sido “respetados”. Asimismo, defendió la “dignidad política” de quienes defienden esta opción desde la cárcel frente a quienes “están paseando por los medios y diarios su dolor”, en alusión a Pascal.