El volcán Etna, en la isla de Sicilia (sur), ha experimentado hoy una nueva erupción, la séptima desde el pasado 16 de febrero, que ha causado una copiosa lluvia de cenizas en las localidades aledañas, informaron este domingo el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) y los bomberos de Catania.

"La actividad eruptiva del Etna se reanudó esta mañana desde el cráter hacia el sureste a una altitud de 2.800 metros: copiosa caída de ceniza en los municipios de Zafferana a Guardia y Giarre, con molestias al tráfico. No hay solicitud de ayuda para los bomberos de Catania ", indicó ese cuerpo en Twitter.

Según el INGV, una nube de cenizas se dispersó en dirección este-sureste y, a partir del mediodía, la amplitud media del temblor volcánico experimentó un aumento antes de llegar al final de la actividad.

Las autoridades italianas tuvieron que cerrar el pasado 16 de febrero el aeropuerto de Catania por los problemas de visibilidad derivados de la nueva erupción del Etna, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia.

Esa primera erupción duró varias horas y al día siguiente Catania y los municipios de los alrededores amanecieron cubiertos de ceniza y de fragmentos de lava.

Después, le siguieron otras más leves en los últimos días y el pasado miércoles la ciudad de Palermo, también en Sicilia, pero a unos 200 kilómetros del Etna, amaneció con un ligero manto negro de ceniza en el aire, que se fue depositando en los tejados de las casas, según los medios italianos.