Buenos Aires - La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito presentó ayer martes por octava vez, en el Congreso argentino el Proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), después de que en 2018 los diputados lo aprobaran pero quedara cancelado por el Senado.

A pesar de que el 14 de junio del año pasado la Cámara Baja aprobó el texto, el 8 de agosto los senadores lo rechazaron con 38 votos en contra, 31 a favor y dos abstenciones.

El polarizado debate sobre el aborto legal, seguro y gratuito vuelve en 2019 con el objetivo, por parte de multitud de organizaciones sociales y feministas, de que vea la luz en este año marcado por las elecciones presidenciales y legislativas de octubre próximo.

La marea verde volvió ayer a la plaza del Congreso argentino para apoyar la presentación del proyecto de Ley, confiadas “con lo aprendido” tras la negativa del Senado en 2018.

Desde las tres y media de la tarde se sucedieron diferentes acciones simultáneas en más de cien ciudades del país, acompañadas por pañuelazos y concentraciones en diversas capitales del mundo, que tenían su epicentro en la plaza del Congreso argentino de la mano de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

Hasta Buenos Aires se desplazaron también 190 representantes regionales de diferentes organizaciones afines para participar en talleres e incluso un festival con el que dieron a conocer este proyecto que defiende que las personas gestantes puedan acceder a un aborto voluntario legal y seguro hasta la semana catorce de gestación, de forma gratuita en hospitales y centros públicos y con una cobertura total en obras sociales, mutuas o en la medicina privada.

La iniciativa incorpora también un sistema de plazos y causales para los casos de violación o si corre riesgo la vida o salud integral de la madre -hasta ahora únicas situaciones no punibles-, así como la completa despenalización para las personas que deciden abortar hasta la semana 14. - Efe